Elisabeth Reyes: "Quiero que mi hija se parezca a su padre"

¿Ya sabes el sexo del bebé?
Parece que es una niña, aunque todavía no está confirmado al cien por cien.

¿Querías una niña?
Yo quería que saliera bien. Sergio tampoco tenía preferencia. Los dos queríamos que todo fuera por buen camino y vamos con pies de plomo, porque ya lo pasamos mal la otra vez.

Lo perdiste cuando ibas a cumplir el tercer mes de embarazo, ¿tenías prisa por volver a quedarte embarazada?
Yo quería estar recuperada totalmente. Fue muy duro, porque ya sabía que era un niño y le había visto moverse. Me costó recuperarme, tanto psíquica como físicamente, porque mi cuerpo también había vivido un cambio importante. Me tenía que curar para volver a quedarme embarazada.

¿En quién te refugiaste?
En mi familia, mi marido y amigos. La hija de una amiga me ayudó mucho y a recuperar la ilusión por quedarme embarazada al tenerla en brazos.

Vas a dar a luz en Málaga, ¿ya has empezado a comprar cosas para la pequeña?
Todavía no he empezado a comprar nada, pero mi madre ya le está comprando todo rosa. Además, ahora cuando he estado en mi tierra, mi madre ha quitado toda mi ropa del armario y ha empezado a colgar las cosas de la niña. A mí es que todavía me da un poco de respeto comprarle cosas.

¿Habéis pensado en el nombre?
Todavía no. Sergio me deja elegir a mí. Aunque si hubiera sido niño se llamaría como el padre, porque le hacía mucha ilusión.

¿Estará Sergio en el parto?
Salgo de cuentas el 3 de abril, justo el día de cumpleaños de Sergio. Él estará en Kazán, pero me encantaría que estuviera en ese momento tan bonito del parto. Por eso, supongo que me lo tendrán que programar para que sea así.

¿Tienes antojos?
Me ha dado por comer aceitunas con pepinillos, menos mal que en Rusia hay. También como mucho chorizo frito.

¿Cómo te has adaptado a Rusia?
Kazán es una ciudad diferente. El clima y el carácter de la gente no tiene nada que ver con España. Es una situación difícil, porque además no hablan inglés y sólo hablan en ruso. Yo les digo: "No ruski", pero ellos siguen hablándome en ruso.

¿Tenéis amigos?
Afortunadamente allí juegan también dos futbolistas españoles y con sus mujeres hemos hecho una pequeña pandilla. Así los días se hacen menos pesados.

¿Cómo es tu día a día en Kazán?
Como casi no trabajo, me ocupo de las tareas de mi casa. De todas formas, ahora me voy a empezar a mover en varias agencias de modelos en Moscú.

Antes de fichar por un equipo ruso, estuvisteis viviendo en Grecia, ¿realmente te has sacrificado por seguir a tu marido?
El trabajo de Sergio es complicado porque nunca sabes dónde vas a estar el día de mañana. Además, es una carrera corta y tenía que aprovechar el momento. Alguno de los dos se tenía que sacrificar y lo he hecho yo.

Pero la carrera de modelo también es corta.
Ya. Para mí no ha sido realmente un sacrificio, porque estoy feliz y enamorada. Voy haciendo mis trabajos, pero no al mismo nivel de antes. Puede ser que esté sacrificando una parte de mí, que es mi trabajo, pero es algo secundario y me compensa.

¿No echas de menos tu vida de antes?
Tampoco tanto, es una etapa totalmente diferente.

Ahora eres más madura.
Sí. Guardo muy buenos recuerdos de aquella etapa, pero era y soy feliz ahora. Además, yo sigo estando en contacto con la gente aunque viva fuera.

¿Te gustaría que tu hija siguiera tus pasos como modelo?
Yo no la voy a obligar a nada. Que sea lo que quiera. A mí nadie me obligó a ser modelo y gracias a Dios mi familia siempre me ha apoyado. Por eso he sido muy feliz. Yo nunca he tenido un problema en mi casa por elegir esta carrera y haberme presentado a Miss España.

Es tu primer hijo, ¿cuántos te gustaría tener?
Si fuera por Sergio, tendría cinco, pero vamos a empezar por uno. A mí me gustaría tener dos o tres, porque cinco me parece una barbaridad. A Sergio y a mí nos encantan los niños. En mi casa siempre ha habido muchos niños y siempre me he implicado.

Por lo tanto, no te va a costar criarlo.
Pues no, porque tengo la ventaja de que tengo nociones para criar a un niño. Además, me gusta informarme.

¿Vas a dar el pecho a tu hija?
Me gustaría, pero hasta que no llegue el momento no lo sé.

¿Ves a Sergio cambiando pañales y dando potitos?
Sí, porque creo que va a ser un padrazo. Es una persona muy responsable y hará todo lo que tenga que hacer.

¿Habéis pensado quiénes van a ser los padrinos?
Sí, lo teníamos muy claro desde el principio. Serán mi hermano y la hermana de Sergio.