Las posturas que favorecen la concepción
Básicamente se buscan aquellas que favorecen una penetración profunda; no sólo porque los espermatozoides tendrán menos camino que recorrer hasta encontrarse con el óvulo, sino también porque facilitan el orgasmo femenino, cuyas contracciones ayudan al semen a alcanzar el útero. Abstente de utilizar lubricantes. Y cuando se haya producido la eyaculación, quédate tumbada boca arriba unos 15 minutos, mejor elevando ligeramente las caderas.
Variaciones del misionero: Partiendo de la postura clásica del misionero (el hombre tumbado encima de la mujer, mirándose cara a cara), prueba a rodear su cintura con tus piernas o incluso a colocar en su hombro una de tus pantorrillas.
Postura Indra: Pide a tu pareja que se coloque de rodillas; tú túmbate boca arriba y colócale los pies juntos a la altura de su pecho. Durante el coito él debe dejar caer su peso hacia adelante, de manera que tus muslos descansen sobre tu torso.
Del arco o la caña: Ponte tumbada boca arriba con las piernas flexionadas y en esta postura levanta la pelvis arqueando tu espalda. El hombre tiene que estar situado de rodillas frente a ti y debe sujetarte por las caderas para establecer tanto el ritmo como la profundidad de la penetración.
Postura del galgo: Colócate a gatas apoyándote sobre las manos. Tu pareja, que estará de rodillas detrás de ti, debe penetrarte en esta postura. Para ayudarse puede cogerte a la altura de las caderas. Si os resulta una posición muy cansada podéis seguir tumbados, poniendo un cojín debajo de tu pelvis.
De la amazona: El hombre debe estar tumbado boca arriba en la cama y la mujer colocada a horcajadas y en cuclillas sobre él, preferiblemente dándole la espalda. Situada en esta posición podrás ser tú la que controles la profundidad de la penetración.
Postura al borde de la cama: Túmbate boca arriba, apoyándote sobre los codos y dejando los glúteos justo en el borde de la cama. Tu pareja tiene que colocarse de rodillas en el suelo, asegurándose de que su pene se encuentra a la altura de tu vagina. Además, para conseguir el máximo grado de penetración puedes rodear su cuerpo con tus piernas.