En la última edición de 'Las Campos' María Teresa Campos se reunió con su hijas Terelu y Carmen Borrego en una divertida comida de chicas con Mila Ximénez. Aunque el momento destacado llegó cuando María Teresa pidió trabajo en televisión. Terelu quiso ausentarse un momento para ir al baño y su hermana Carmen la siguió, un momento a solas con Mila que Teresa aprovechó para expresar sus deseos de volver a los platós. "¿Cuándo vas a volver con nosotros a la tele?", preguntaba Mila con curiosidad. Teresa, sin perder la sonrisa, hacía referencia a una tercera persona. "¿Por qué no se lo preguntas a la persona indicada?", contestó, evitando decir nombres, pero lanzando una indirecta a quien quisiera darse por aludido.
Mila, que no quiso entrar en polémica, declaró que no sabía a qué persona debía dirigirse, a lo que Teresa respondió con sorna "yo tampoco".
No osbtante, y pese a que la presentadora no ha tenido un programa de televisión desde que '¡Qué tiempo tan feliz!' dijera adiós a la parrilla, Teresa manifestó su optimismo a la hora de esperar nuevas propuestas laborales. Porque pese a que hace tiempo que pasó la edad de jubilación en España, con sus 77 años, Teresa espera volver a ser la reina de la pequeña pantalla, negándose a ceder el testigo a nuevos rostros.
Con una sonrisa, Teresa afirmó rotunda que no pierde la esperanza: "Estoy segura de que antes de retirarme tengo el derecho de, como otros tantos, tener otro programa en plató", sentenció. Recordemos que María Teresa Campos no presenta un programa desde que en 2017 se canceló '¡Qué tiempo tan feliz!', el show en el que Campos recibía a diferentes artistas.
El momento bochornoso para María Teresa Campos llegó en otro momento del programa, cuando Terelu y Carmen mostraron su lado menos simpático en la clínica, donde las hermanas se mostraron impacientes. Y es que las prisas porque les trajeran la comida hizo que Carmen y Terelu se mostraran poco educadas, en opinión de Teresa Campos. "¿Nos pueden traer ya la comida? Si no viene ya, me levanto y me voy", se quejaba Terelu.
Abochornada, la progenitora reprimió a sus hijas, a las que acusó de haber tratado mal al personal del centro médico. "¿Pero a quién hemos tratado mal nosotras?", se defendían las hermanas.
El momento divertido llegó cuando María Teresa Campos acompañó a sus hijas en la comida. Y es que mientras Terelu y Carmen sólo podían comer purés y comidas detox, María Teresa y una amiga se deleitaron con varias delicias que hicieron que sus hijas envidiasen la comida de su madre. "Hemos venido para acompañaros no para sacrificarnos", justificó la presentadora con humor.