De la alegría a la alarma en menos de diez días. Si el pasado 31 de enero, la tonadillera ofrecía sus primeras declaraciones tras el nacimiento de su cuarta nieta, Carlota –hija de Kiko Rivera e Irene Rosales–, durante las que sonreía a cámara y expresaba su felicidad, hoy Isabel ha preocupado a sus fans.
La tonadillera ha cancelado los conciertos que tenía previstos en Miami, en el James L Knight Center, y en Puerto Rico en el Coliseo de San Juan, para el 11 de febrero y el 18 del mismo mes respectivamente. Al parecer, según 'El programa de Ana Rosa', Isabel tenía que haber cogido un vuelo esta mañana a las 7 con destino a Miami, pero a última hora ha decidido cancelarlo.
Según Israel López, colaborador del programa, este contratiempo podría estar producido por problemas burocráticos. "Tiene el visado en regla pero le reclaman otro papel y el empresario no lo tenía listo y por eso se retrasa todo. Si ese retraso implica no llegar a un ensayo previo al concierto de Miami, no dará ningún concierto", afirma el periodista, que añade: "Isabel alega que no estaría en condiciones para dar el concierto".
Se trata de los conciertos de su gira 'Hasta que se apague el sol', que tenía previstos para el 13 y 15 de octubre de 2017, y que tuvo que aplazar a consecuencia del paso del huracán Irma y "los terribles desastres naturales que han afectado a Florida y Puerto Rico".
En conversación telefónica con otro periodista residente en Miami, a estas horas el concierto no se ha cancelado e incluso se siguen vendiendo entradas. "Los artistas vienen con un visado especial para trabajar aquí en EE.UU. y ese es el documento que le faltaría a Isabel. De suspenderse sería un palo muy grande para todos porque ella aquí es una gran diva", insiste el periodista, que también explica que de cancelarse "sería responsabilidad del empresario no de ella".