La preocupación de sus invitados
Joaquín y su mujer, muy preocupados por la salud de Bertín, le ofrecieron hasta su cama para poder tumbarse hasta que se le pasara el mareo. "Desgraciadamente no hemos podido terminar como nos hubiera gustado, pero ha aguantado el tirón como un buen profesional", señalaba el futbolista.