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Finalmente, Blanca ha conseguido que la Reina escriba una carta al presidente solicitando el indulto para Inés y acude a la cárcel a contárselo. Arrepentida, piensa que es la única manera de recuperar el amor de Cristóbal.
Aurora duda de sus sentimientos
Aurora ha vuelto y Celia está feliz. Sin embargo, esa noche ella tiene que acompañar a Velasco a la pedida de mano de la hermana del inspector, para hacer que son parejas, mientras que Aurora tiene un acercamiento con Marina… Se hacen amigas y en una de sus conversaciones le confiesa que Beatriz ha abortado. También se ofrece a ayudarla a buscar trabajo.
Días después, todo sale a la luz y Celia tiene un desencuentro con su pareja, quien pensaba salir a cenar sola o con otra compañía…
La relación de Elisa y Carlos empieza a levantar sospechas. Por un lado, Carolina directamente le cuenta a don Ricardo que Elisa mantiene una relación con el chico, algo que su padre no puede permitir.
También Sofía está convencida de que Carlos tiene una amante y no está dispuesta a aceptarlo.
Don Luis cae en la trampa
Aunque parecía imposible, Francisca y don Luis deciden enfrentarse juntos a Beatriz: “No podemos permitir su chantaje”. Antes de que puedan actuar, se enteran de que ha sufrido un aborto y que quiere ver a su amante. Francisca le anima a hablar con ella sin pensar que se trata de una trampa.
Merceditas encuentra una pulsera de Eugenia
La pequeña Eugenia sigue desaparecida y en la familia discuten porque algunos creen que Adela debería haberse quedarse al cuidado de la niña y no irse a trabajar. Además, Merceditas encuentra la pulsera que llevaba el bebé. Una importante pista que les puede ayudar a recuperarla.
La felicidad vuelve al hogar
Gracias a esa pista, encuentran al bebé, lo que da fuerzas a Adela para instalarse de nuevo en la casa y enfrentarse al nuevo casero: don Ricardo.
Una decisión con consecuencias
Es tarde y de nada ha servido a Blanca actuar para liberar a Inés, pues Cristóbal rompe con ella. Para sobreponerse a la ruptura, la bella Silva se ofrece como voluntaria en la oficina Pro Cautivos y recibe una inesperada proposición por parte de Rodolfo. “Volvamos a vivir juntos. Te sigo amando”, asegura él. Ella acepta a condición de que no esté doña Dolores. Cuando el hombre se lo comenta a su madre, a la mujer le da un ataque al corazón.
La tía Adolfina tiene un tumor
La tía Adolfina se presenta en la casa en camisón y despeinada, exigiendo que se le sirva el desayuno. Rosalía avisa a Adela, que decide que Cristóbal la explore. Por desgracia, la noticia no puede ser peor: la tía Adolfina tiene un tumor cerebral y morirá pronto. Las Silva deciden ingresarla en un sanatorio para que esté bien atendida, pese a la oposición de la mayor de las Silva, que preferiría cuidar de ella.
Diana y Salvador, tras el asesinato de Green, intentan localizar a Alonso para que les diga qué hacer con los documentos robados. Pero no lo logran y deben actuar por su cuenta. Benjamín los descubre y le piden ayuda para deshacerse del cuerpo de Green de forma discreta.
La cosa se complica cuando Rodolfo se da cuenta de que le han robado los documentos… y Diana descubre que su contenido es más comprometedor de lo que pensaban.
Elisa cada vez tiene más dudas sobre qué hacer con su relación con su amigo Carlos y se niega a verle a solas en un hotel. Pero todo da un giro cuando el chico insiste y va a por ella, encontrándola en el suelo: ¡ha sido atacada!
Desde entonces, Elisa se queda muy angustiada, pero cuando llega el momento de ser interrogada, la pequeña de las Silva no consigue dar pistas a Velasco sobre su atacante, lo que preocupa a todas sus hermanas, que deciden extremar las precauciones.
Por desgracia, Salvador cae en manos de los alemanes y Diana se inquieta al saber que está secuestrado. “Quieren un dosier que tenéis en vuestro poder o si no matarán a tu esposo”, le comunica Rodolfo, que se ha visto obligado a ejercer como intermediario.
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