La última sesión

Paty sigue entusiasmada con las enseñanzas de Iago Narbona y pide a su amiga Olga que acuda con ella a una sesión de meditación para que compruebe su método.

Mas tarde, la camarera se enfada mucho cuando descubre que María, su jefa, ha pedido a Elías que investigue al terapeuta. “¿Por qué te has metido en este asunto? No es un delincuente”, asegura enfurecida.

Sin embargo, lo que descubre el agente no es nada bueno, ya que el joven es un estafador que ya ha trabajado en otros lugares y ha captado a otras personas, como Candela, que aparece de repente en una de las clases de
Narbona.

La joven trata de ayudar a Paty, que no se cree nada de lo que le cuentan.

Elías pide a la chica que colabore con él para detenerlo y ella acaba accediendo. “No puede seguir engañando a más gente”, argumenta el policía muy convencido.

Alicia confiesa a Iker que se siente muy responsable del joven agente con el que patrulla.

Además, a pesar de su poca experiencia, Miguel quiere entrar en acción cuanto antes y pide a su compañera que lo deje participar en el operativo que se ha montado contra los narcotraficantes. “No creo que sea el momento. Este
caso es realmente peligroso. Debes esperar un poco más”, le aconseja.

Por su parte, Antonio comunica a Claudia que ha sido admitido en el estudio clínico montado por el doctor Salazar y deberá pasar como mínimo tres meses en Italia.

Esa misma noche, la inspectora y su hija despiden con lágrimas al médico, que parte rumbo a Milán.

Gallardo sigue haciendo de las suyas y provoca que los planes de Sergio de huir de España terminen fallando.

Al enterarse Sofía, entra en pánico. “Pagarás muy caro esta traición que acabas de hacerme”, le dice a su examante, al que retiene contra su voluntad con la custodia de Tote.

Muy presionado, el abogado acaba devolviendo todo el dinero robado a la mujer, pero el asunto no queda ahí.“Ahora, lo matarás”, ordena a Gallardo.

Muy asustada y convencida de su decisión, Nacha pide a Bremón que tramite enseguida su salida de la comisaría.