Ana Patricia, gran heredera de Emilio Botín, le despide con un guiño 'rojo'

La familia y los amigos y colegas más cercanos de Emilio Botín han despedido para siempre al banquero. En la tarde de este jueves era enterrado en el panteón familiar de la finca que el clan Botín posee en la localidad de Puente San Miguel, en Cantabria.

El que fuera presidente del Banco Santander desde 1986, uno de los hombres de las finanzas más respetados y poderosos del mundo, nos decía adiós de una forma inesperada el martes 9 de septiembre debido a un ataque al corazón, por eso el golpe ha sido devastador especialmente para su familia.

En la imagen vemos a la esposa del banquero, Paloma O'Shea, durante el entierro, celebrado en la más estricta intimidad.

Tras la repentina muerte de Emilio Botín, que el próximo 1 de octubre iba a cumplir 80 años, todas las miradas se han centrado en su primogénita, Ana Patricia, que horas después de su muerte era nombrada presidenta ejecutiva del Banco Santander, dando continuidad a la saga familiar al frente de la entidad financiera.

Tan discreta o incluso más que su padre, Ana Patricia ha tomado las riendas del mayor banco de la Eurozona y uno de los mayores del mundo, como había previsto su progenitor.

Es la mayor de seis hermanos: Ella, Carmen, Emilio, Carolina, Paloma y Francisco Javier, y tiene casi 54 años pues nació el 4 de octubre de 1960.

Es licenciada en Económicas por la Universidad Norteamericana de Bryn Mawr. En América también estudió en Harvard y domina cinco idiomas.

Comenzó a trabajar en la banca con 20 años, en la Banca Morgan, y fue creciendo en la empresa hasta que fue nombrada directora del Área Latinoamericana de esta entidad hasta que en 1988 se incorporó al Banco Santander.

En 2002 se hizo con la presidencia de otro mítico banco español, Banesto, tras la adquisición de este por el Santander. Se mantuvo en el cargo con muchos éxitos y un gran reconocimiento hasta 2010, cuando se marcha a Londres como consejera delegada de la filial británica del Santander en el Reino Unido.

Aunque todo el mundo la veía desde hace tiempo como presidenta del Santander tras la posible retirada de su padre, la muerte de Emilio Botín ha hecho que la sucesión se acelere y que llegue este momento con todo el dolor de su alma, pues ha supuesto el adiós para siempre de su padre.

En la imagen, Ana Patricia Botín completamente rota en el entierro de su padre.

Aunque en el mundo de los negocios Ana Patricia Botín es una mujer muy respetada y conocida, en lo que respecta a su vida privada, la discreción con la que ha vivido siempre deja pocas puertas abiertas a conocerla con gran profundidad.

La nueva presidenta del Santander está casada desde 1983 con el ingeniero agrónomo Guillermo Morenés -hijo menor de los marqueses de Borghetto- a quien dio el 'Sí, quiero' en la capilla de Puente San Miguel, la finca de Santander donde los Botín celebran todos sus acontecimientos en privado. El matrimonio tiene tres hijos: Felipe, Pablo y Javier.

De ella se sabe que es una mujer entregada pues, a pesar de sus responsabilidades, cuando sus hijos eran pequeños sacaba tiempo por las tardes para estar con ellos e incluso ayudarles a hacer los deberes.

A pesar de que le gusta vivir sin levantar titulares son famosas sus fiestas de fin de año en su casa en Gstaad (Suiza), donde reúne a lo más selecto de las finanzas europeas.

De sus gustos sabemos que le gustan los looks sobrios y que no es habitual verla de compras. Suele adquirir sus prendas durante sus viajes a Nueva York, Londres o París.

Es una melómana reconocida, preside de la Fundación Albéniz, y es fundadora de la Escuela Superior de Música Reina Sofía. Entre sus aficiones también se encuentra el golf.

También es fundadora y vicepresidente de la Fundación Empresa y Crecimiento; y fundadora y presidenta de la Fundación Conocimiento y Desarrollo.

En 2010 fue elegida como una de las mujeres más poderosas del mundo por la revista 'Forbes', que la situó en el puesto 38. En el Reino Unido, donde trabajaba hasta este momento, es considerada la tercera mujer más poderosa tras la reina Isabel II y la ministra británica de Interior, Theresa May.

En la imagen, Ana Patricia Botín en el entierro de su padre. Siguiendo las costumbres del banquero, llevaba una prenda roja, el color del Banco Santander.

Emilio Botín O'Shea, el cuarto de los hijos de Emilio Botín. En la imagen lo vemos junto a su esposa Elizabeth D'Ornaneu, francesa emparentada con la familia Poniatowsky, y uno de sus hijos.

Paloma Botín O'Shea, tercera de los hijos de Emilio Botín. Es la encargada de la Fundación Botín.

Carmen Botín O'Shea con su familia. Es la exmujer del golfista, ya fallecido (2011), Severiano Ballesteros.

Javier Ballesteros Botín,  hijo mayor de Severiano Ballesteros y Carmen Botín. Es el presidente de la Fundación Seve Ballesteros.

Covadonga O'Shea, cuñada de Emilio Botín.

Entre los asistentes que estuvieron en el entierro de Emilio Botín se encontraba el empresario Alberto Cortina, en la imagen a la derecha con un traje azul.

Los restos mortales de Emilio Botín han recibido sepultura en la más estricta intimidad en la finca que la familia posee en la localidad de Puente San Miguel, en Cantabria. Este es el momento de la llegada del féretro con los restos mortales del banquero.

Botín descansará para siempre en el panteón familiar donde también reposan los restos de su padre y su abuelo.

El funeral se oficiará este sábado, día 13, a las cuatro y media de la tarde en la Catedral de Santander. Más adelante, en fecha aún por concretar, se celebrará otro en Madrid.

Horas antes del antierro de Emilio Botín se abría su capilla ardiente de forma privada a sus seres queridos, amigos y líderes de la banca y las empresas, que acudían a despedirse para siempre de él y acompañar a su familia en este momento tan difícil.
La familia Botín, tan discreta como siempre, no quería hacer ninguna declaración y preferían vivir su dolor en la intimidad.

En la imagen vemos a la viuda de Emilio Botín, Paloma O'Shea, a la llegada a la capilla ardiente, instalada en la casa palacio del Promontorio, en Santander.

Entre las personalidades del mundo de la banca y financiero que se han acercado a la capilla ardiente de Emilio Botín se encontraba su gran competidor, el presidentde del BBVA, Francisco González.

El empresario Juan Abelló, uno de los hombres fuertes de Banesto en la etapa primera de Mario Conde al frente de la entidad.

El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, en el centro con corbata verde, una de las principales eléctricas españolas.

El presidente de Endesa, Borja Prado.

El político y expresidente de Cantabria, la tierra natal de Emilio Botín, Miguel Ángel Revilla.