Diez Minutos participa en varios programas de afiliación de marketing, lo que significa que Diez Minutos recibe comisiones de las compras hechas a través de los links a sitios de los vendedores.
La reconciliación; ‘Amar es para siempre’
Benigna y Manolita se encuentran en el cementerio y, tras varios reproches, acaban reconociendo que no pueden estar enfadadas. Ya en casa, la cocinera recibe al novio de Marisol. Antena 3. Del 9 al 13 de noviembre
Por
Telenovela
Manuel Fiestas
QUÉ HA PASADO
• Pelayo revela a Socorro que Maica tiene un hijo.
Si no era suficiente con que Emma se avergonzara de él, ahora Manolín se encuentra con la desconfianza de Abel. “¡Estás espiando tras la puerta! Vergüenza debía de darte mirar a las chicas”, le humilla, dejándolo abatido. Al menos, su esposa le pide perdón: “Tú eres muy bueno. El problema es cómo me han criado”.
Manuel Fiestas
Juan, el marido de Maica, llama para avisar que va a Barcelona y quiere verla. Al sentirla inquieta, Gorka la pregunta que por qué se casó: “Ni yo lo entiendo. Quizá para olvidar lo mal que lo pasé contigo”.
Manuel Fiestas
Una vez que Manolita ha tirado la toalla, la calma regresa a la casa de los Gómez.
Manuel Fiestas
A lo que no renuncia es a limpiar la tumba de su hija y se acerca al cementerio cuando alguien la sorprende.
Manuel Fiestas
“Manuela, Manuela, ¡qué sé que me has visto!”, le grita Benigna por detrás. “Al menos, contéstame…”, sigue reprochando hasta que la cocinera se da la vuelta
Manuel Fiestas
“¿Y cómo quieres que te trate si me has dejado sola en el peor momento de mi vida?”, le reprocha. “Te considero mi hermana y tenía que advertirte de que te estabas metiendo en un camino hacia la frustración”, explica la mujer.
Manuel Fiestas
Poco a poco, le saca una medio sonrisa al recordar buenos momentos y planeando otros futuros: “Si sigues enfadada, ¿con quién vas a irte una semana a Benidorm a bailar pasodobles? Anda, dame un abrazo”.
Manuel Fiestas
Las amigas terminan fundiéndose en un reparador abrazo que les hace saltar las lágrimas.
Manuel Fiestas
Después de esto, las amigas limpian las tumbas de Marisol y Benito y repasan fotos de la chica, que su madre guarda en la cartera, para poner una en la lápida. Allí, se percatan de que hay una nota en la lápida: “Es de Paco. La quería tanto… Tengo que llamarlo y quedar”.
Manuel Fiestas
Mientras, Socorro está convencida de que el bebé que le quitaron a Maica al nacer fue entregado en un convento fuera de Madrid. “Llamaré a una monja amiga de la familia de Santander para intentar localizarlo”, comenta a Pelayo.
Manuel Fiestas
Abel va a la reunión de militares descontentos con el nuevo régimen. “Me alegro de verte por aquí”, le recibe Beltrán. Atenta, Estefanía se ofrece a servirles bebida, pero se niegan: “No entres. Tratamos temas demasiado delicados”.
Manuel Fiestas
Ante el fracaso para recabar información, Miguel da un paso más. “Tendrás que quedar tú sola con Beltrán y hacer lo que te pida”, la amedrenta una vez más y ella no sabe qué debe cumplir.
Manuel Fiestas
Arrepentida, Benigna da con Virginia. “Te perdono si me dices quién es mi padre”, dice la joven. Para lograrlo, se pone a recopilar datos de Goyita: “Si su hija nació en agosto de 1958, solo hay que averiguar con quién se veía por esas fechas”. A su lado, Justo parece nervioso y hace todo lo posible por cambiar de tema: él fue su cliente y cree que podría ser el padre.
Manuel Fiestas
Cristina se debate entre coger un caso que pondría a Guillermo, ahora en otro despacho, contra las cuerdas. Todo cambia cuando su excompañero se presenta en son de paz: “Tengo dudas de si debo volver”.
Manuel Fiestas
En el obrador, Virginia empieza a sentirse atraída por Fabián, algo malo para ella y se confiesa con Gorka: “Siento deseo carnal por él”. Sin embargo, se siente ilusionada y prepara con Maica una fiesta al joven por su cumpleaños. En ella, Fabián se niega a revelar el secreto que le ha llevado a ser tan rudo: un cura abusó de él cuando era niño.
Manuel Fiestas
Días después, Manolita queda con Paco y este le comenta que es incapaz de dejar a su mujer. Al marcharse, deja un reguero de barro en el suelo, lo que hace a la cocinera recordar las palabras de la portera donde apareció el cuerpo de su hija: “Cuando la policía se fue, quedaban huellas de hombre y mucho barro en el suelo…”.
This content is created and maintained by a third party, and imported onto this page to help users provide their email addresses. You may be able to find more information about this and similar content at piano.io