Una doctora solitaria y un arquitecto (Keanu Reeves) se enamoran platónicamente escribiéndose cartas a través de un correo que, misteriosamente, une el tiempo pasado con el presente. La doctora Kate Forester (Sandra Bullock) decide, de repente, mudarse: abandona Illinois para trabajar en un importante hospital de Chicago. Lo único que lamenta es dejar la hermosa y original casa con vistas al lago en la que vivía. Antes de irse, deja una nota en el buzón dirigida al próximo inquilino, pidiéndole que le envíe el correo a su nueva dirección y explicándole que las extrañas huellas de patas que hay en la puerta de entrada ya estaban allí cuando ella se instaló en la casa. Pero cuando el inquilino llega, lo que ve es una casa muy abandonada: polvorienta, sucia, y con el jardín invadido por la maleza. Lo que no ve son huellas de patas por ningún lado.
De Corea del Sur a Estados Unidos
La casa del lago es el remake de la película surcoreana Il Mare (2000), dirigida por Lee Hyun-seung y protagonizada por Lee Jung-jae y Jun Ji-hyun. El filme asiático obtuvo tan buenas críticas que Warner Bros decidió producir la misma historia en suelo americano, entonces bajo la dirección del argentino Alejandro Agresti, que sumó así su primer largometraje de producción estadounidense.
Los grandes protagonistas de La casa del lago fueron Keanu Reeves y Sandra Bullock, que gracias a este trabajo volvieron a reencontrarse en la gran pantalla, casi una década después de haber liderado el elenco de Speed: Máxima potencia (1994).
The Lake House. EE.UU., 2006. Romance. 105 min. Dir.: Alejandro Agresti. Int.: Keanu Reeves, Sandra Bullock, Christopher Plummer, Ebon Moss-Bachrach, Willeke van Ammelrooy, Dylan Walsh, Shohreh Aghdashloo.