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Sus diseños son habituales en artistas como Katy Perry, Blanca Suárez o Paula Echevarría y fue la primera española en distribuir sus colecciones
a través de internet. María
Escoté aporta su espíritu vitalista como jurado de Maestros de la costura, el programa de moda de La 1.
¿Ha tardado mucho en llegar un formato así?
Estamos contentos porque era necesario un programa donde ver nuestro oficio, que es oculto. No se conocen las horas de trabajo y esfuerzo que hay detrás.
¿Cómo te calificas como jurado?
Tenemos que ser duros y eso ha sido difícil, pero cuando ves los resultados de los concursantes te das cuenta de que merece la pena.
Raquel Sánchez Silva dice que eres
el contrapunto de Palomo y Caprile.
Cada uno tiene un target y un estilo propio. Caprile, la experiencia y técnica, y Palomo, el color y la fantasía.
¿Ha habido roces entre vosotros?
Desde el principio hemos conectado estupendamente y no creo que pudiera haber mejor equipo.
¿Algún favorito?
Luisa. Una mujer luchadora que consigue todo lo que se propone. Su evolución es espectacular.
¿Qué sientes al vestir a artistas como Blanca Suárez o Miley Cirus?
Cuando una celebrity reconocida en todo el mundo te elige teniendo a su disposición toda la ropa que quiera, es una recompensa al trabajo bien hecho.
Tu colección primavera-verano de este año es un homenaje a Lady Di.
Siempre ha sido para mí un icono de la moda y, aprovechando el 20 aniversario de su muerte, he querido inspirarme en ella.
¿En las alfombras rojas de España hay tanto glamour como en EE.UU.?
Hay que quitarse el complejo. En los Goya hay buen cine y un estilazo tremendo.
Si Caprile es el juez más gruñón, sobre todo con
la parte técnica, y Palomo el más bohemio por su estilo, Escote es la más exigente: “En mi taller soy así. Me olvidé
de que estaba en
un talent show…”.
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