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Me encantaría decir que las decisiones que tomo con respecto a mi casa tienen en su mayoría efectos estéticos, pero lo cierto es que no. Casi todo lo que acabo deliberando con respecto a la organización de mi casa tiene fines únicamente prácticos. Necesito servirme a mi alrededor de aquellos objetos que, por más elegantes que sean, además me resulten funcionales en el día a día, sobre todo cuando llega el fin de semana y me pongo con las tareas del hogar.
Sin ir más lejos, poner una lavadora, tenderla, recogerla y ordenarla… todo es mucho más sencillo sirviéndote de una cesta de almacenaje como esta que he encontrado para esta temporada. Antes de comprarla, me empapaba abrazando la ropa sacada de la lavadora para lograr llevarla hasta el tendedero ¡con lo incómodo que resulta! ¿Hay algo más horrible que recoger la colada en los brazos y, que, por el camino, formes una línea de metro solo con el rastro de los calcetines que se te van cayendo?
Una cesta ideal al mejor precio
Con esta cesta de Ikea yo ya no sufro, pero es tan especial que ni tan siquiera se parece a aquellas tan ideales de las que os hablaba el otro día. Se trata de una alternativa rústica de ratán, de esas que transmiten calidez y naturalidad nada más verlas. Lo que más me llama la atención es su forma en trébol, muy distintiva, que la diferencia de otras cestas más básicas, lo que sumado al detalle de la banda decorativa azul, le aporta un aire alegre y desenfadado.
Especificaciones
| Altura | 26 cm |
|---|---|
| Ancho | 40 cm |
| Longitud | 40 cm |
Su gran tamaño me resulta perfecto para trasladar sin esfuerzo toda la ropa húmeda de una vez y olvidarme de hacer equilibrios imposibles. Ahora bien, cuando la colada está hecha, la cesta pasa a ser un práctico espacio de almacenaje para mantas, cojines o incluso revistas como la nuestra. En el salón se integra sin problema como un objeto decorativo más, y en el dormitorio funciona de maravilla para mantener el orden sin renunciar al estilo.
Y hay un detalle más que la hace todavía más especial: esta cesta pertenece a una edición limitada dentro de la colección OMMJANGE. Para mí, ese carácter efímero le añade valor, porque sé que no se trata de un objeto masivo que pueda encontrarse en todas partes durante años, sino de una pieza pensada para quienes saben apreciar tanto su funcionalidad como su diseño único. En definitiva, un accesorio práctico, decorativo y con el encanto añadido de lo exclusivo.
Juan Sáez es experto en cultura pop, crónica social y estilo de vida. Escribe acerca de fenómenos sociales y culturales bajo una mirada crítica y comprometida. Lo que Carrie Bradshaw habría sido si, en lugar de subirse a unos Manolos, se hubiera comido una caja de seis.
Licenciado en Periodismo por la Universidad Carlos III, analiza tendencias, historias y noticias desde el humor para que el lector ría y reflexione en una sola pieza. Ha colaborado en programas de televisión y crea contenido para redes, donde aporta análisis frescos e irónicos con un sello muy personal.
