Cómo decorar la mesa de Navidad por menos de 10 euros: 10 utensilios y objetos de decoración navideña baratos y bonitos para una ocasión especial

¿Hay algo más navideño que las flores de bayas rojas? Porque yo creo que no. Cualquier mesa navideña necesita un centro y esta corona es perfecta para que reine la mesa. El color rojo vivo de las bayas es el tono perfecto porque hace destacar todo lo que coloquemos aparte. Por fin una corona de centro que no es pomposa, que es algo que cuesta ver en el mundillo de la decoración navideña.

Si hay algo que no puede faltar debajo de los platos, son los mantelitos individuales. Es un básico de primero de decoración de mesas. Es un elemento que aporta mucho orden porque cada plato queda perfectamente colocado. Además, cumplen otra función que es cubrir la mesa para no mancharla; que todos sabemos cómo acaba el mantel después de la cena de Nochebuena…

No podemos tener una corona de centro solitaria. Tenemos que adornarla aún más. Pero sin sobrecargar. Por eso, estos portavelas son perfectos para esta misión. Su base es redonda, por lo que estabiliza un montón la vela y no hay riesgo de que se caiga. Su color dorado pega perfectamente con el resto de la decoración. Además, tienen un poste finito que no tapará a ningún invitado.

Soy fiel creyente de que en la mesa de Navidad cada detalle cuenta y tener los cubiertos bien colocados es esencial. Estos juegos de fundas con forma de árbol en varios colores son perfectos para recogerlos y mantenerlos unidos, además de ser súper bonitos. Estos elementos de decoración son los mejores: prácticos y monos. Sobre todo, hacen una gran función para los más pequeños de la casa.

¿Qué sería de la mesa de Nochebuena sin un mantel con estilo 100% navideño? A mí me encanta sorprender cada año a mi familia con un mantel distinto y cargado de ambiente acogedor. Y este en concreto me ha conquistado. Su estampado verde y con bastones de caramelo y galletas de jengibre van a la perfección con el centro de mesa y los portavelas que antes te había mencionado. Una combinación que parece hecha por el mismísimo Papá Noel.

Una mesa navideña sin velas que irradien luz no es nada. Y unas velas sin portavelas tampoco son nada. Por eso, estos portavelas de madera con formas de renos, estrellas y ángeles mezclan tradición, luz y un punto de ternura que encaja súper bien para la ocasión. Además, no ocupan casi espacio porque como son planos, se pueden disponer a lo largo de la mesa sin que molesten o tapen a nadie.

Si hay algo que me encanta de preparar la Nochebuena en mi casa es personalizar la cena. Me gusta siempre dar un detalle a los miembros de mi familia para que recuerden cada cena. Este año he visto estos platos personalizados con la inicial de cada nombre que me parecen ideales con su borde dorado. Es un regalo práctico que se puede usar desde el primer momento en la cena. Será el regalo perfecto de recuerdo de la cena de Nochebuena.

Otro detalle que se puede lucir en la mesa, e incluso regalar al final de la velada tras los típicos juegos en familia, pueden ser estos jerséis tan monos para botellas. Es un elemento más de decoración que anima un montón la mesa, además de ser súper práctico para que no haya riesgo de que se escurra la botella de vino. Y lo mejor de todo es que también lo puedes personalizar con la letra que quieras.

Otra cosa que no puede faltar bajo ningún concepto son las servilletas. Y en una cena tan importante como la de Navidad no podemos poner las típicas de papel malo del supermercado. Necesitamos unas como estas, que vayan con el resto de la decoración. Su estampado tiene el toque rojo de Navidad perfecto con copos y vegetación nevada. Y créeme, estas servilletas de capa gruesa van a ser muy necesarias cuando empieces a pringarte de langostinos.

Para rematar la mesa perfecta de Navidad, necesitas un camino de tela como este que dé vida al resto de la cena. Su estampado de caramelo y copos de nieve es de lo más animado y unifica toda la decoración. Yo, por ejemplo, lo suelo poner junto a un mantel que no sea muy recargado, porque así destaca aún más. También me gusta acompañarlo de ramas de pino naturales, piñas y guirnaldas finitas. Al final esa es la esencia de un camino de mesa, decorarlo como quieras, hacerlo tuyo. Como la mesa de Navidad.