Cambiar algunos hábitos sencillos en nuestras rutinas de compra, cocinado y aprovechamiento de alimentos es un paso hacia un consumo más responsable con el medio ambiente. Es la eco-dieta. La doctora en Farmacia y nutricionista Amil López Viéitez (www.dietacoherente.com) propone unos hábitos ecointeligentes de sostenibilidad:

Consume alimentos de temporada. Tomar alimentos en su mes o época natural es esencial para respetar su ciclo de producción.

Alimentos kilómetro cero y de producción ecológica. La agricultura ecológica utiliza técnicas respetuosas con el medio ambiente. No emplea productos químicos de síntesis (que en su fabricación y transporte producen emisiones de efecto invernadero). Está menos mecanizada que el modelo intensivo y favorece la biodiversidad local. El 35% de los alimentos ecológicos que se consumen en Europa proceden de España.

Más verde y menos carne. La actividad ganadera es responsable del 18% de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Planificación: cocina más cantidad menos veces

Sartén con verduras fritaspinterest
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Planifica los menús. La doctora López Viéitez recomienda: "Cocina el doble de la cantidad de la receta y así tendrás comida para dos días, también puedes separar las raciones en tuppers y tendrás varias comidas listas para llevarte al trabajo o salir de un apuro cuando llegas tarde a casa".

Ahorro energético: aprovecha el calor residual

Cacerola sobre vitrocerámicapinterest
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La placa de inducción es más eficiente que la vitrocerámica. Un truco fácil es apagarla unos minutos antes para aprovechar su calor residual y reducir el consumo eléctrico. Recuerda tapar la olla cuando esté al fuego, para evitar fugas de calor. El microondas reduce mucho los tiempos de cocinado, por lo que es una opción eficiente.

El dato: 440 kilos es la basura que genera una persona al año

Cubo de basura con residuospinterest
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Esta inmensa cantidad de desperdicios en muchos casos son alimentos válidos para el consumo. Para reducir este dato, trata de no tirar los restos de comida a la basura. Si preparas más cantidad, almacena el sobrante en el frigorífico para que se mantenga en buen estado o congela raciones en 'tuppers' bien cerrados.