Tensión familiar; ‘Mercado Central’

Gracias a Adela, Germán consigue el dinero para pagar la sanción de la empresa que había comprado y deja en evidencia a Elías delante de Jesús.

Además, descubre que su padre conocía la deuda de la empresa exportadora antes de firmar el contrato y no dijo nada para perjudicarlo. “Estás despedido”, le informa para dejar claro cuál es su lugar

Paralelamente, Adela le cuenta a su ex que Julián le ha confesado que Ágata mató a su marido. Él, tras el impacto inicial, decide creer a su actual novia. Sin embargo, la mujer le pide que este problema no salpique a Germám.

Mientras tanto, Jorge descubre que Abigaíl es Celia y que los sentimientos que tenía por él a través de internet eran reales. Por su parte, la joven escritora deduce que la persona que se esconde detrás del avatar es el dueño del puesto de delicatesen y se plantea aparecer de imprevisto para hablar con él.

A pesar de no querer olvidarlo, terminan zanjando el tema: “Es mejor que no haya nada entre nosotros”. David sospecha de ambos, que acaban confesándole su breve flirteo en la red y le ruegan silencio.

Por otro lado, Samuel se disculpa con su familia por el dolor que les ha provocado su adicción al juego. El joven promete hacer todo lo posible para rehabilitarse y, además, su novia lo perdona.

Aunque Samu pide a su madre que siga como presidenta de la Asociación de Comerciantes, Carmen dimite para estar más con su familia.

Noa supera los prejuicios que tiene sobre Alberto y comprende que es un buen apoyo para ella y su madre. Por su parte, Rosa, animada por su hija, acepta una cita romántica con él.

Parece que todo va bien hasta que empiezan a tener relaciones y el mal recuerdo de Nacho provoca que ella se bloquee: “No estoy preparada, lo siento. Espero que puedas entenderme”.

Tras esta incómoda situación, el propietario de la cervecería duda de ser el hombre adecuado, pero ella quiere seguir con la relación y, de una vez por todas, enfrentarse a su exmarido.