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Tras lo que ha pasado en el capítulo 26 de 'Una nueva vida', Seyran ya no es la joven sumisa de antaño, aquella que soportaba en silencio las humillaciones que su madre había tolerado durante tantos años. La paciencia se le ha agotado, y la furia se ha apoderado de su alma. Ya no está dispuesta a permitir que Ferit, su esposo, continúe con la brutalidad de sus ataques. Con una resolución que arde en su pecho, decide huir de la opulenta mansión que, más que un refugio, se ha convertido en una prisión de sufrimiento. Antes de que la violencia se desate una vez más, toma la única decisión que le queda: abandonar todo, salir de ese círculo de abuso.
Halis, al enterarse de la fuga de su hija, estalla en cólera. La furia que lo consume es tan intensa que su voz retumba por toda la mansión. Su ira se dirige hacia Kazym, al que exige con dureza que traiga de vuelta a Seyran para el Iftar. "Seyran está fuera de control", vocifera, su mirada llena de reproche. "Este matrimonio se ha convertido en un juego, y ella no está jugando como se supone que debe hacerlo".
La relación de Abidin y Suna queda al descubierto en 'Una nueva vida'
Esta semana, en 'Una nueva vida', la situación se intensifica cuando Kazym, con la rabia acumulada por la desobediencia de su hija, la obliga a regresar junto a Ferit. La joven se resiste, con la voz quebrada pero firme, argumentando que no puede volver a ese lugar donde la violencia y la humillación son su pan de cada día. "Ferit ha intentado golpearme", le confiesa a su padre, su corazón lleno de un dolor que no encuentra consuelo. Pero en lugar de compasión, Kazym le da un golpe que hace eco en su alma. Un bofetón brutal, sin piedad, pero dejando su rostro intacto, como un mensaje claro: los Korhan no deben sospechar de lo que está sucediendo tras las puertas cerradas.
La verdad comienza a desmoronarse como un castillo de naipes. Ifakat, con la voz baja pero cargada de revelaciones, confiesa a su sobrino que Abidin y Suna mantienen una relación. Las palabras caen como un puño en el estómago de Ferit, quien se siente traicionado por el hombre que consideraba su amigo. La rabia se apodera de él, y en un ataque de furia, intenta agredir a Sultán, creyendo que ha sido él quien ha delatado el secreto. No obstante, la traición lo consume aún más cuando, en su desesperación, renuncia a su puesto de trabajo, sintiendo que ha perdido todo, que su vida se ha derrumbado ante sus ojos.
Mientras tanto, Kazym, que no es ajeno a las intrigas que se tejen a su alrededor, disfruta de una conversación aparentemente inocente con Zerrin. Las palabras de la madre de Pelin son como veneno disfrazado de dulzura. "Ferit acabará dejándola", le dice con una calma inquietante, "y cuando eso pase, mereces obtener algo a cambio. Tengo un amigo abogado en Estambul, recibirás una gran compensación por parte de los Korhan tras el divorcio". La promesa de un futuro lleno de dinero y poder parece seducir a Kazym, quien, sin pensarlo dos veces, acepta la oferta. La esperanza de beneficios le da la fuerza para continuar en un juego en el que, quizás, no tiene más que perder.
La decisión de Seyran se vuelve cada vez más firme, como un roble que resiste el viento más feroz. Kazym, que al principio no había comprendido las profundidades del sufrimiento de su hija, comienza a ceder. Le habla con un tono más suave, como si finalmente entendiera la magnitud de la situación. "No digas mañana que sigue siendo tu esposo", le dice con franqueza. "No habrá vuelta atrás. Si tú quieres, te divorciarás. He estado pensando en lo que te ha hecho Ferit, y el tema está cerrado. Ya no hay nada que hacer." La decisión, como un peso que se levanta, parece definitiva.
Seyran decide no regresar con Ferit en 'Una nueva vida'
Pero justo en ese instante, Ferit aparece en la puerta, decidido a llevarse a su esposa de regreso a la mansión. La súplica en su rostro es palpable, pero Seyran, con el corazón acelerado, se niega a ceder. En un giro inesperado, Kazym le propina un bofetón a su yerno, dejándolo tendido en el suelo, humillado. La ira de Kazym es palpable, su postura protectora hacia su hija no tiene margen de duda.
A pesar de la humillación, Ferit no se rinde. Se levanta lentamente, y con el rostro marcado por la derrota, extiende la mano hacia Seyran. "Vámonos juntos, por favor", le suplica, con la desesperación pintada en los ojos. "Te lo suplico.” Pero Seyran, con el alma rota pero firme, lo mira con una frialdad que lo desarma. "No, Ferit. No me voy a ir contigo. No hay vuelta atrás.” El destino de todos parece marcado, pero el amor y el odio se entrelazan en una lucha sin fin. ¿Será Seyran capaz de escapar de su pasado, o caerá nuevamente en las redes de un matrimonio destructivo? Solo el tiempo lo dirá.
Pilar Martínez es periodista especializada en contenidos de televisión y cultura, se graduó en la carrera en Periodismo en la Facultad de Ciencias de la Información (Universidad Complutense de Madrid) en el año 2018. Desde entonces ha pasado por las redacciones de Ecoteuve (El Economista), donde realizó sus primeras prácticas durante el verano del 2016.
Posteriormente, concretamente, en el año 2017 se pasó al grupo Hearst España, donde comenzó su andadura en las revistas de televisión: Supertele, Teleprograma, Telenovela. Ahora colabora con Diez Minutos, en su versión web, donde se encarga de realizar los avances semanales de las ficciones diarias de moda, así como entrevistas y artículos sobre los melodramas o telenovelas que aterrizan en nuestro país y aquellos que están por venir.
Toda una cazadora de exclusivas. A esto, se suma su puesto como redactora jefe de la sección de novela narrativa en la revista Culturamas, medio digital de alto impacto al que lleva unida desde el año 2013. Ávida lectora, cinéfila y seriéfila de primer nivel, ha hecho de su vocación su oficio.
