El experto en nutrición Luis Zamora explica en 'Y ahora Sonsoles' los beneficios de las patatas según su cocinado. "La patata, cuando toque, hay que disfrutarla", dice. Las patatas son grandes aliadas de la gastronomía española, un básico en todas las casas. Sin embargo, un alimento que tanto consumimos resulta ser visto como una opción no tan saludable, y lo que realmente sucede es que no lo conocemos. Para ser más conscientes de los beneficios del tubérculo, el experto Luis Alberto Zamora, conocido como 'Nutrimán', acudió a 'Y ahora Sonsoles' a explicarnos todo lo que deberíamos saber.

    "La patata parece que está demonizada", bromeaba. "Han salido estudios que decían que si comías frecuentemente patatas fritas tenías más riesgo de diabetes. Pero eran estudios que analizaban el comer patatas fritas todos los días". Dándonos la clave para disfrutar de platos como la tortilla de patata sin tener miedo a que nuestra salud pueda empeorar, el experto confiesa que "depende de cómo la cocines cambia completamente su perfil nutricional", por lo que la solución no es dejar de comer patata, sino saber cómo tratarla bien.

    raw potatoes varied of different shapes and colors on rustic wood
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    Los beneficios de la patata: la diferencia entre freír y hervir

    Aunque todos sabemos que no es lo mismo una fritura que un alimento cocido, el experto nos explica más a fondo la distinción. "Cuando fríes una patata, se sale el agua, la deshidratas, por lo que se concentra todo", cuenta Luis Alberto, que explica los cocinados también suponen un aporte calórico totalmente distinto: mientras que las patatas fritas son 520 calorías por cada 100 gramos, si decides cocerlas, se reduce a 74 calorías. Ese cambio saludable también se da en hidratos de carbono, donde la fritura tiene tres veces, además del doble de grasa de una patata cocida, que solo tiene alrededor de 0,10 gramos. "Depende de cómo la cocinemos, podemos incluir todos los días una patata cocida, asada, al horno... Lo que tenemos que controlar son las fritas, no prohibirlas", dejaba claro.

    basket of french fries
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    Otro de los puntos a tener en cuenta y por el que consideramos que no es alimento tan saludable son los hidratos de carbono que contiene, que pueden subir el nivel de azúcar en sangre. Pero para evitar esos picos, también nos hemos llevado algún truco. "Una vez que la hemos cocido, una vez calentita, la pasamos por agua fría", decía el experto ante el asombro de Sonsoles Ónega. "Así se hace un almidón resistente, cambia la estructura. Ya no se absorbe y digiere tanto, sino que pasa al intestino y se convierte en un probiótico, genial para la flora y sin dar esos picos de azúcar". Otro de los tips es combinar la patata con alimentos con fibra, que hacen que los hidratos se liberen más lentamente; e incluso aliñarla con vinagre o zumo de limón.

    Más allá de la patata: otros tubérculos y sus beneficios

    Aunque es cierto que es uno de los alimentos más presentes en nuestra dieta, hay tubérculos que no consumimos tanto y que igualmente nos aportan grandes beneficios, tal y como ha explicado 'Nutrimán'. Desde el boniato, rico en fibra, vitamina A y vitamina C, hasta la chufa, que "va muy bien para el corazón y para tener una piel joven". Incluso la yuca, más desconocida para nosotros, es buena para los huesos, aunque es importante que debe hervirse por aproximadamente 20 minutos.

    sweet potatoes
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    Sin embargo, más allá de todos los consejos que compartió, el colaborador experto en nutrición también quiso dejar claro que una buena dieta no se trata de restricciones: "La patata, cuando toque, hay que disfrutarla".