- Rocío Carrasco confiesa el motivo por el que intentó quitarse la vida
- Fidel Albiac asegura "estar tranquilo" sobre todo el revuelo del testimonio de Rocío
"Son los más duros y "es imposible no emocionarse", así anunciaban los nuevos episodios de 'Rocío. Contar la verdad para seguir viva'. Rocío Carrasco ha relatado, entre lágrimas, la dureza de sus embarazos. Ha contado que "en cuanto tuve una falta de un día, dentro de mi supe que estaba embarazada, así que me hice un predictor", y no ha tardado en echarse a llorar: "fue uno de los días más felices de mi vida". Sin embargo, todo se truncó cuando se lo contó a Antonio David: "Él me decía que no podía ser. Sé que me lo decía porque si a mi se me hubiera pasado por la cabeza no tenerlo y él me decía eso, sabía que yo haría lo contrario. Así que se aseguró el resultado".
"Cuando se lo contamos a su familia les faltó decir 'uy, lo hemos conseguido", asegura. Con la familia Jurado fue algo distinto: "Mi madre reaccionó bien, mi padre no... Me dio un bofetón que la cabeza me dio vueltas como la niña del exorcista, y me dijo 'te lo dije que te arruinaba la vida", cuenta, "después me dio un abrazo y me dijo que habían conseguido lo que querían, y ahora con dos huevos para adelante".
Ha contado que la madre de Antonio David reaccionó bastante mal cuando le contó que quería ponerle a su hijo el nombre de su padre, Pedro Juan, porque además Juan era el nombre del padre de Antonio David. A lo que su madre respondió, según sus palabras: "O Juan Pedro, ¿no? Que el niño te lo ha hecho él, no te lo has hecho tú con un dedo".
Muy emocionada, Rocío cuenta que "me volví loca" al saber que esperaba a una niña: "Me daba igual el sexo pero al saber que era niña... Otra Rocío en la familia", cuenta orgullosa. Sin poder contener las lágrimas, ha narrado el parto de Rocío: "Era una muñeca". "Yo estaba completa, pletórica. Siempre me he considerado una buena madre".
"No sé si fue el día más feliz de Antonio David, pero el día que se aseguró el futuro sí"
"Él con la niña era locura también, pero estaba menos porque trabajaba... Pero yo a él al principio, hasta que me separo, lo tengo como un buenísimo padre", declara.
Lo más duro, cuenta, fue cuando llegó su segundo embarazo
Ha desvelado las presuntas infidelidades por parte de Antonio David. Asegura que le pilló in fraganti. "Lo vi en un bar y salí corriendo y llorando, entonces me empezó a doler mucho la barriga y empecé a tener como pinchazos, como contracciones", confiesa.
"Me entró un ataque de pánico y no como mujer porque me estaba poniendo los cuernos, me entró como madre, porque estaba embarazada de él", asegura entre lágrimas. "En ese instante decido que me separo".
"Estás loca", "Las hormonas te están afectando" o frases como "los celos te están volviendo loca". "Por culpa de los celos vas a malparir a tu hijo" son las supuestas palabras que le decía Antonio David Flores a Rocío Carrasco mientras estaba pasando por el segundo embarazo, por el de David, en el que ya ella le acusaba de infiel y tuvo que ser ingresada por problemas en su gestación. "Yo no me creí nunca que estuviera loca, pero me hizo dudar sobre mi actitud y mi verdad". Rocío ha contado que a partir de aquel momento la actitud de Antonio David era de "desprecio y humillación absoluta. Crueldad, esa palabra lo engloba perfectamente todo".
Poco después vivió uno de los mayores sustos de su vida: "Pensé que iba a perder a mi hijo". Tras una visita al médico, me mandaron guardar reposo: "Yo a ese médico de urgencias no le podía contar que yo no estaba tranquila... Sabía que algo no iba a bien, sentía dolores en la parte de arriba de la panza, bajadas de tensión...". Y cuenta que estaba aterrorizada, "en caso de que fuera real de que yo iba a malparir a su hijo, habría sentido que era culpa mía y que él tenía razón".