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Parece que tras sus vacaciones, los días en 'Sálvame' se le están haciendo cuesta arriba a Kiko Hernández. Hace unas semana, el madrileño tuvo que zanjar los rumores que había sobre una posible relación íntima con su compañero de obra de teatro, Fran Antón. "Todo el mentira. No tengo ni novio ni novia. Estoy en el mercado (...) Ojalá pudiera venir hoy aquí y decir: '¡señores estoy enamorado!'", explicaba. Aclarado este tema, parece que los fantasmas les siguen saliendo al colaborador y esta vez tiene que ver con una íntima amiga.
El pasado lunes 17 de octubre, Marta López decía en 'Sálvame' que se encontraba algo molesta porque su amigo no le cuenta tanto de su vida como antes: "Hace tiempo que no comparte nada conmigo ni yo con ella", comentaba la colaboradora. Cuando Kiko Hernández negó tener una relación sentimental con Fran Antón, desveló a sus compañeros que había tenido dos relaciones serias en su vida, algo que parece que su mejor amiga no sabía. Un día después, Kiko Hernández desvelaba que su relación con Marta López ya no es la misma. El colaborador explicaba que todo empezó con la participación de Marta en 'Supervivientes'. La colaboradora pidió a su amigo que la "preparara" para el concurso y su consejo fue claro: "Le dije que no fuera a lamerle el culo a Olga Moreno".
Este 27 de octubre, Marta y Kiko se veían las caras en 'Sálvame' protagonizando un momento muy tenso al principio pero emotivo al final. "Estoy en un momento más sensible de mi vida, una enfermedad de un familiar y estoy muy sensible por eso. Kiko ha estado pendiente pero últimamente menos", comenzaba diciendo Marta López aunque poco le faltaba para derrumbarse. "Para mí Kiko Hernández es parte de mi vida, no un amigo de la tele (...) Mi madre le quiere como a un hijo, no le tengo nada que reprochar. Le tengo que agradecer los 20 años que ha estado conmigo Él decide quién está en su vida y quién no. A mí Kiko me ha dado la vida siempre", continuaba llorando.
Aunque al principio se sentaba al lado de la colaboradora muy enfadado, luego le era inevitable hacer las paces con su amiga: "Me siento mal de que estés aquí hablando de esto. La amistad de verdad no se arregla en un plató de televisión", decía Kiko pero terminaba por abrazarse a su amiga: "El otro día me equivoqué. Has sido parte importante de mi vida y lo vas a seguir siendo. Es tanto lo que me ha dado y me ha aportado… Son muchos años y eso no se rompe de la noche a la mañana".