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Elena Tablada ha empezado por todo lo alto el 2024, y es que sin cortarse un pelo ha decidido que quiere apuntarse a esto de hacer concursos. La cubana es una de las celebrities que completan en casting de 'Bailando con las estrellas', el programa de danza que Telecinco ha recuperado y que por fin, tras mucha espera, estrenará este 13 de enero a las 22:00. En su presentación este jueves se los concursantes pasaban por los micros de la Prensa, y allí fue donde Elena habló sobre el reciente esguince que podría complicarle el programa, pero también sobre su situación sentimental y sobre el juicio pendiente que tiene con su ex, Javier Ungría.
La cubana, según dijo, está en un momento personal y profesional bonito, pero cuando se le preguntó si estaba abierta al amor, se le pusieron los pelos de punta y sorprendió con su respuesta: "Yo estoy abierta, pero estoy esperando que no llegue pronto", afirmó entre risas, antes de dejar claro: "No me hace falta". Tras su complicada separación del empresario, en la que ha habido hasta detectives privados, Elena ha decidido que primero quiere reconectar consigo misma: "No, no, no... ahora estoy reenamorándome de mí, estoy sacando a esa niña interior que con los años, poco a poco, se ha ido apagando. Yo he ido cargando con etiquetas que no me corresponden: de 'presidenta de club de fans', que jamás he sido; de cazafortunas... entonces claro, la Elena real la van apagando, y yo quiero volver a encenderla", ha confesado.
Respecto al juicio, no ha querido entrar en demasiados detalles, ya que "quedan meses, así que ni lo pienso", pero sí ha desmentido que su relación con su ex sea difícil: "Pudiendo tener relaciones buenas, para qué vas a tenerlas malas. Que tampoco es mala. Si yo no discutía estando en pareja, ahora, sin ella, menos voy a discutir", ha dicho tajante.
Por otro lado, Elena también se abría sobre la relación con sus hijas (Ella y Camila), y desvelaba que no les hacía gracia que concursara en 'Bailando con las estrellas' con el esguince recién hecho, pero ella ha querido seguir adelante. Además, señalaba con 'resignación' que están en edades nada fáciles: "Se llevan súper bien entre ellas, lo que pasa es que la mayor es muy buena pero está en la adolescencia y es complicado, y la pequeña lleva a todos rectos como una vela: se ve lo que ella quiere en la televisión, yo he venido sin bufanda porque a las 7 de la mañana quería su vestido de Rapunzel... Ella es la que manda, eso es un monopolio. Y tiene 3 años... 3 para 25", ha bromeado.
