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Si hace unos meses nos hubieran dicho que Antonio Tejado iba a estar en prisión provisional acusado de ser el autor intelectual del robo a su tía, María del Monte, no nos lo habríamos creído, pero la realidad supera, con creces, la ficción, y ésta es, precisamente, la nueva realidad del sobrino de la folclórica. Después de que el juez viera indicios de su implicación en el delito junto a una banda de atracadores rusos (y teniendo en cuenta que él ya tenía antecedentes), ha sido imposible que se libre de la prisión, por lo que ahora a Tejado no le queda más remedio que esperar a que se celebre su juicio mientras ve la vida pasar desde un centro penitenciario. Y podría parecer que adaptarse a la cárcel es complicado, pero da la impresión, por lo último que hemos sabido, que él se está amoldando muy bien, tal y como te contamos en el vídeo superior.
A pesar de que él mantiene su inocencia desde el primer día, y su familia le respalda, no puede salir de la cárcel ni siquiera bajo fianza, pero él ya está haciendo planes para cuando pueda salir: primero, según fuentes cercanas, estaría dándole vueltas a contarlo todo en televisión y empezar a hacer caja, y segundo, parece que ha retomado proyectos -como el de estudiar unas oposiciones para ser guardia forestal- y ha empezado otros nuevos, como un curso de marquetería. De hecho, estos días, en una de las últimas visitas que ha recibido de su hermano, su madre y su novia, se les ha podido ver salir del centro penitenciario con una caja en la que iban varios enseres personales, y uno de ellos era nada menos que un objeto hecho a mano por Antonio.
El objeto en cuestión era un escudo del Sevilla FC, equipo del que Tejado es seguidor, y que además había adornado con purpurina. Esto no es sólo un bonito detalle para la familia, y así tenerle presente en casa, sino que también deja claro cómo está evolucionando, porque si hace unos días se decía que estaba triste, alicaído y hasta perdiendo peso, ahora parece que ha decidido centra todas sus fuerzas en estar más positivo, activo y con la mente ocupada.
