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El juicio de Daniel Sancho continúa sin prisa pero sin pausa en Koh Samui. Tras unos días de paréntesis por las festividades del año nuevo en Tailandia, este miércoles se retomaban las sesiones ante el juez, por las que han pasado ya varias decenas de testigos, e incluso se ha sabido que más de un testimonio le ha dado una alegría, como la forense que respaldó la teoría de la pelea entre Edwin y Daniel y no la del asesinato premeditado, que podría costarle la cadena perpetua o incluso la pena de muerte al hijo de Rodolfo Sancho. Precisamente el actor está entregado al 100% con la defensa de su hijo en un caso tan truculento como este, y hasta ha buscado el dinero debajo de las piedras para poder pagar su estancia en Tailandia y también a sus abogados mientras se enfrenta a otro escollo personal.
¿Y cual es ese 'escollo'? Ni más ni menos que la relación con su ex y madre de Daniel, Silvia Bronchalo. Si la pareja ya tenía mala relación de antes, el juicio ha empeorado aún más la situación entre ellos, incluyendo una denuncia de Silvia a Rodolfo por vejaciones e insultos que ya se investiga en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Alcobendas (Madrid). De hecho, tan distanciados están que incluso sus actitudes están siendo de lo más turbadoras a las puertas de los Juzgados de Koh Samui, por donde desfilan cada día para asistir al juicio que dictará el futuro de su hijo en común.
En los días previos ya vimos a un Rodolfo Sancho compungido, serio o hasta enfadado con los periodistas, pero desde este 17 de abril, la forma de encarar la situación por parte del actor ha sido distinta. Ahora se muestra ante la Prensa sonriente, y hasta se para a hablar con los periodistas para informar de que todo "va bien" a pesar de la gravedad del asunto. Una actitud que, sin embargo, desconcierta y sorprende en comparación con la de Silvia, a la que siempre se ve cabizbaja y claramente triste por lo que les está tocando vivir, y es que la ex actriz ya dejó claro -y muy resumido con una sencilla frase- cómo ve la situación: "Aquí nadie ha ganado. Todos hemos perdido", sentenció.
Por lo pronto, las sesiones del juicio, si no hay cambio de última hora, están a punto de acabar y, una vez que eso ocurra, el juez se tomará unas semanas para deliberar, repasar las pruebas y testimonios y tomar una decisión sobre el futuro que aguarda a Daniel Sancho. La familia y los abogados del acusado han manifestado que se muestran optimistas y tienen buenas sensaciones, mientras que la familia de Edwin Arrieta busca que todo el peso de la ley caiga sobre el joven, y es que están convencidos de que el cocinero mató deliberadamente a el cirujano colombiano.
