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Daniel Sancho ya se encuentra en el Tribunal Provincial de Samui, al sur de Tailandia, para declarar por el presunto asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta. El hijo de Rodolfo Sancho dará hoy su testimonio sobre lo que sucedió en la noche del 2 de agosto en la que falleció Arrieta. Será, sino hay ningún contratiempo tras el receso del mediodía de la vista de este martes. Una vista en la que no solo testificará el acusado, también se espera que lo hagan los tres policías, uno de inmigración y dos de la comisaría de Phangan, isla cercana a Samui donde detuvieron al chef tras el supuesto asesinato.
El juicio se ha reanudado tras su aplazamiento el pasado 25 de abril por problemas con el aire acondicionado en el tribunal en medio de una intensa ola de calor en Tailandia. La avería del tendido eléctrico ya ha sido resuelta y se espera que el juicio continúe con normalidad. La declaración más esperada es la de Daniel Sancho que tendrá que demostrar que no hubo premeditación. Como cada mañana desde que comenzó el juicio, el acusado es trasladado a la corte en un furgón policial desde la cercana cárcel de Samui, donde se encuentra en prisión provisional desde el pasado 7 de agosto. Por primera vez, desde que comenzó el juicio, el acusado ha sido trasladado en un furgón con cristales sin tintar y no en el solían llevarle, cuya ventanas estaban tintadas. Parecía aparentemente tranquilo e iba compañado de otro preso. Daniel vestía el mono granate que llevan los presos de la cárcel de Koh-Samui, no llevaba mascarilla e iba esposado al techo del furgón.
Este 30 de abril no es un día cualquiera en el juicio. Se trata de una fecha clave. El chef declará por primera vez y contestará a las preguntas clave del fiscal, como por qué compró los cuchillos, por qué reservó una habitación cuando Edwin ya tenía otra reservada y por qué no acudió a la policía tras la muerte de Edwin.
La testificación de Daniel podría alargarse durante varias horas y la hará con la ayuda de un intérprete. El acusado confesó en un primer momento el asesinato premeditado de Arrieta frente a la Policía, pero luego afirmó que se trató de un accidente, insistiendo en que la muerte del cirujano se produjo de manera accidental durante una pelea y que él actuó en defensa propia. La defensa de Daniel había solicitado que el acusado declarese el 1 de mayo, para tener un día completo para su declaración, pero finalmente no ha sido así.
Se esperaba que en la siguiente sesión declaras su padre, Rodolfo Sancho, como testigo. Pero finalmente, la defensa ha descartado su declaración para que el actor estuviese presente en la sala arropando a su hijo mientras este testificaba.
A pesar de haberse suspendido el juicio durante varios días, los abogados no descartan que el caso quede visto para sentencia, como se había programado. Aunque podrían celebrarse sesiones suplementarias a lo largo de la semana que viene, dependiendo de las agendas de magistrados, fiscales y de la sala.
