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Jessica Bueno no está pasando su mejor etapa en lo personal, y es que a su reciente ruptura con Luitingo, con el que llevaba ya más de un año saliendo tras conocerse en 'GH VIP 8' -y hasta habían hablado de boda y acababan de adoptar una gatita juntos-, ahora hay que sumarle un nuevo drama con el que ha preocupado a sus seguidores desde sus redes sociales. La modelo, devastada tras su separación del cantante, está intentando levantar cabeza centrándose en el trabajo y en sus tres hijos, pero precisamente ahora sus pequeños son el problema que le está quitando el sueño, y así lo ha revelado en su cuenta de Instagram: "Se me coge aquí un nudo que me duele, que parece que me falta todo", decía bastante compungida señalándose la boca del estómago.
"No es solo por eso (refiriéndose a su reciente ruptura), es que tengo una impotencia y un cabreo por mis niños que yo no sé...", añadía. "Se supone que se tenían que haber ido el jueves de viaje, pero se canceló porque al final el domingo, pero se vuelve a cancelar porque al final el lunes. Tenía tanta ilusión mi hijo, que le dije que no pasaba nada y que podía faltar al cole porque va muy bien. Y el lunes también cancelado el viaje", apuntaba bastante mosqueada.
Jessica Bueno vive un nuevo problema
Al parecer, todo podría tratarse del acuerdo que tiene con el padre de los niños, el jugador de fútbol Jota Peleteiro -que actualmente vive en los Emiratos Árabes-, al que no ha mencionado, pero sí ha lanzado una pullita muy directa, pues su relación desde que se divorciaron (amistosamente, según contó Jessica) no ha sido la más fluida, sobre todo por la batalla judicial posterior: "Hay que pensar, y mi mente está enfocada en el trabajo, en hacer mi vida, en poder darle lo mejor del mundo a mis hijos y que no les falte de nada. Que no nos hace falta NADIE", aseguraba rotunda.
La joven está muy molesta por estos cambios de planes, ya no sólo porque le trastocan los que ella tenía hechos, sino por que se juegue con la ilusión de sus hijos, Jota Jr y Alejandro. Jessica tiene otro hijo más mayor, Francisquito, fruto de su corta pero intensa relación con Kiko Rivera, que estos días atrás ha estado con su padre en Sevilla y ha podido conocer a su prima Alma -la hija de Anabel Pantoja- tras su preocupante paso por el hospital.
