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Que Kiko Rivera tenga mala relación con su madre no significa que haya gestos que no le duelan, como su ausencia este pasado fin de semana en la Primera Comunión de su hija Ana. Una comunión que congregó a gran parte de la familia Pantoja, como Anabel, que acudía con su chico, David Rodríguez, y su pequeña Alma, o todo el clan Cortés-Bollo. Sin embargo, la tonadillera fue a la que todos echaron en falta una vez más en otro gran evento familiar. Dicen que la esperanza es lo último que se pierde, pero es que el año pasado, en la comunión del Albertito -hijo mayor de Isa Pantoja- también causó baja, y no había indicios de que en esta ocasión fuese a ser diferente. Kiko, por su parte, quiso disfrutar en paz de la fiesta de su hija, pero horas después, tras el gran día, quiso tener unas palabras en las redes sociales con duros reproches a su madre.
Kiko Rivera es de los que no le tiemblan ni la mano ni la boca a la hora de decir las cosas que piensa, y esta vez no ha sido excepción, porque ya bastante duro es explicarle a una niña de apenas 9 años por qué su abuela volvía a faltar a un día tan importante para ella. Por ello, no han faltado los reproches velados a Isabel Pantoja: "Hemos estado contigo los que de verdad sabemos lo especial que eres. Te acompañamos con amor, con alegría y con lágrimas de emoción en los ojos, porque tu felicidad es también la nuestra. A veces, hija, la vida nos enseña que no todos estarán cuando más los necesitamos… pero también nos enseña algo aún más valioso: quiénes sí están. Y esos, los que hoy te abrazamos, te miramos con ternura y celebramos contigo, son los que debes guardar siempre en tu corazón", exponía Kiko en un primer post de Instagram.
Kiko Rivera se deshacía en agradecimientos a quienes le han dejado mensajes bonitos, pero también se refería a quienes le critican precisamente por no hablarse con su madre: "Vivimos en un mundo donde todo el mundo tiene algo que decir sobre cómo deberías vivir tu vida, pero casi nadie sabe qué hacer con la suya. Es curioso cómo sobran opiniones y faltan empatías. Todos tienen la receta perfecta para tu camino, pero no son capaces de ordenar el suyo. Te señalan, te juzgan, te corrigen... pero no se miran al espejo. Y mientras tanto, tú te tragas emociones, callas verdades, y aprendes a sonreír aunque por dentro estés a punto de explotar. Ya basta. Cada uno debería tener derecho a sentir sin pedir permiso. A vivir sin justificarse. A equivocarse sin que lo crucifiquen".
Kiko Rivera anuncia que "necesita parar" y preocupa a sus seguidores
El artista, después de un fin de semana de emociones muy intensas que se suman a sus serios problemas de salud -como su ictus-, echaba el freno este lunes 2 de junio por la mañana, y preocupaba a todos al anunciar que se tomaba un tiempo en las redes sociales para focalizarse en sí mismo, recuperar una rutina sana y centrarse en su familia de nuevo: "Hay momentos en los que simplemente no puedo más. Creo que he ido con el pie demasiado pisado al acelerador, sin darme cuenta de que el cuerpo y la mente también necesitan frenar. Respirar. Escuchar lo que realmente está pasando dentro de mí. Porque no soy una máquina, soy humano… y me estoy desbordando", expresaba antes de anunciar que se alejará de las redes un tiempo: "Esto no es un adiós. No es un 'lo dejo todo'. Simplemente, necesito parar un momento. Darme ese permiso que tantas veces le damos a los demás pero no a nosotros mismos: el permiso de descansar, de descomprimir, de respirar profundo, de resetear. Ayer fue un día muy duro emocionalmente. No voy a entrar en detalles, pero algo dentro de mí se rompió un poco. Quizás eso tenga algo que ver con cómo me siento hoy. O quizás simplemente mi mente ya estaba al límite y ese fue el empujón final".
