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A la abogada y periodista Cruz Sánchez de Lara no le gusta demasiado ahondar en su pasado, y menos en algunos episodios excesivamente duros que le tocó vivir hace más de 20 años. De hecho, tan sólo su entorno más cercano sabía lo que tuvo que pasar, cuando tenía apenas 30 años y un niño pequeño. Hasta ahora. Huir de los malos tratos no es nada fácil, y ella lo sabe en primera persona, pero a día de hoy ya tiene la fuerza suficiente para hablar de ello, y con su experiencia personal y su influencia ha querido hablar de ello para poner el foco en las víctimas, muchas de ellas queriendo huir de eso y sin saber cómo. Algo similar a lo que le pasó a la escritora de 'En la corte de la zarina': "Denunciaron por mí y hay una condena", confesó a las cámaras de Europa Press. "Afortunadamente hace 20 años. Forma parte de mi historia, pero ya no de mi vida [...]. Yo perdono, yo vivo. Yo no guardo rencor, no soy rencorosa", añadía. "Agradezco seguir con vida".
Unas palabras que ahora han resonado más que nunca, cuando se ha sincerado con Susanna Griso en el programa 'Espejo Público'. Muy enfadada por los fallos que se están reportando en las pulseras antimaltrato que estos días han salido a la luz, la actual pareja del periodista Pedro J. Ramírez ha tirado de experiencia personal para hablar abiertamente del miedo que ella misma pasó cuando tuvo que dejar atrás su vida con su ex porque la agredía, el mismo miedo que sufren muchas mujeres hoy en día: "Llegué a Madrid con una maleta, un niño de 4 años y un problema muy grave que no sabía reconocer", empezaba relatando, con la voz entrecortada, nerviosa y pidiendo perdón de antemano a sus padres, que estarían viendo su entrevista en televisión y tampoco les gusta recordar aquella época tan complicada en la que también sufrieron mucho.
Cruz Sánchez de Lara, muy dura con la ministra Ana Redondo: "Tu integridad no implica solamente que te asesinen"
"Muchas mujeres que nos están viendo hoy están muertas de miedo. Tienen sus vidas hechas una ruina y lo único que quieren es que las crean. No quieren ver en la cárcel a los padres de sus hijos, porque tienen un sentimiento interno de culpa, pero hay que ayudarlas a salir de la situación en la que se encuentran", apuntaba Cruz, que también se mostró muy molesta por las palabras de Ana Redondo, ministra de Igualdad, que afirmó, tras reportarse los fallos "ninguna de las mujeres que llevaban pulsera ha sido asesinada". "Tu integridad no implica solamente que te asesinen", afirmó la periodista, y con razón, ya que el maltrato tiene muchas formas.
Además, Cruz ha revelado que, ni siquiera cuando se marchó del lado de su agresor, durmió tranquila. "Al acercarme a 50 kilómetros de la ciudad donde yo residía, las manos me temblaban", relataba ante la atenta y sorprendida mirada de Griso. Un miedo con el que no le quedó más remedio que aprender a convivir a pesar de que consiguió que condenaran a su ex porque, como ella misma ha dicho, "el miedo es subjetivo, el riesgo es objetivo", y ese riesgo es en el que se basan muchos jueces a la hora de valorar un caso de malos tratos ante la ley y dictar medidas de protección, por lo que el miedo, que es libre, siempre está ahí. Sin duda, una dura historia que nos ha estremecido. Si estás en una situación similar, o conoces a alguien que lo esté, no dudes en llamar al 016, número gratuito contra la violencia de género y que no aparecerá en tu factura de teléfono, para pedir ayuda, información, asesoramiento jurídico o atención psicosocial inmediata.
