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Esta semana en 'La Moderna', Mercedes sostuvo una conversación profunda con Paula. Con la voz cargada de urgencia, le insistió en que no desafiase a su padre, un hombre de sombra alargada y peligros insondables. Pero Paula, con el fuego de la determinación en la mirada, escuchó sin prometer nada. Mientras tanto, en la majestuosa mansión Pedraza, Maruja logró lo impensable: convencer a Emiliano de asistir a la fiesta benéfica que habí organizado con esmero. Pero la aparente victoria se desvanecí en cuanto él cruzó el umbral. En lugar de apoyar a su esposa, el empresario arruinó el evento, sembrando el escándalo entre los invitados y provocando su huida. Con los ojos encendidos por la ira, Emiliano le lanzó una promesa helada a Maruja: su venganza sería implacable.
Pietro se quedó solo de nuevo en 'La Moderna'
Silvia y Pedrito llegaron a Madrid con un propósito claro: visitar a Pietro. El reencuentro fue cálido, lleno de conversaciones pausadas y recuerdos compartidos. Don Fermín, consciente de lo que estaba en juego, le ofreció un empleo a Silvia con la esperanza de evitar que se llevara a su hijo a Venezuela. Pero la joven, con el corazón dividido, rechazó la propuesta. Tras unos días sumergida en la vida de Pietro y Antonia, tomó una decisión: regresar a Galicia con Pedrito, llevándose consigo la nostalgia de lo que pudo haber sido.
Agustín no pudo apartar la preocupación de su mente. La brutal paliza a Ramallo seguía sin respuesta, y la verdad se escurría entre las sombras. La tensión aumentó cuando el Encapuchado de La Puerta del Sol volvió a atacar. El capitán Dávila, decidido a desentrañar el misterio, reactivó los interrogatorios en La Moderna y exigió los cuadrantes de turno de los trabajadores. Pero Quico, astuto y osado, se adelantó al peligro. Con manos rápidas y nervios de acero, alteró los documentos, desviando la atención de Dávila. Un movimiento audaz, sí, pero no sin consecuencias.
Inés y Laurita estrenaron su película en 'La Moderna'
Don Fermín, con la visión de un hombre que no se rendía, repartió dulces a los clientes, intentando devolver a La Moderna su esplendor tras la crisis de la intoxicación. Pero no se detuvo ahí. En un giro inesperado, tomó una decisión que cambió el destino del negocio: nombró accionistas minoritarios a Pietro, Cañete y Teresa, otorgándoles un lugar en el futuro de la empresa. Mientras tanto, las hermanas Valbuena recibieron la noticia que tanto anhelaban: su película ya tenía fecha de estreno. La espera había terminado; el gran día se acercaba.
Pilar Martínez es periodista especializada en contenidos de televisión y cultura, se graduó en la carrera en Periodismo en la Facultad de Ciencias de la Información (Universidad Complutense de Madrid) en el año 2018. Desde entonces ha pasado por las redacciones de Ecoteuve (El Economista), donde realizó sus primeras prácticas durante el verano del 2016.
Posteriormente, concretamente, en el año 2017 se pasó al grupo Hearst España, donde comenzó su andadura en las revistas de televisión: Supertele, Teleprograma, Telenovela. Ahora colabora con Diez Minutos, en su versión web, donde se encarga de realizar los avances semanales de las ficciones diarias de moda, así como entrevistas y artículos sobre los melodramas o telenovelas que aterrizan en nuestro país y aquellos que están por venir.
Toda una cazadora de exclusivas. A esto, se suma su puesto como redactora jefe de la sección de novela narrativa en la revista Culturamas, medio digital de alto impacto al que lleva unida desde el año 2013. Ávida lectora, cinéfila y seriéfila de primer nivel, ha hecho de su vocación su oficio.
