El final de 'Love is in the air': los mejores momentos de la serie

Durante la primera temporada, la pareja se trasladó a Antalya para cerrar un importante negocio. Pero no todo iba a ser trabajo, los enamorados hicieron una pequeña escapada y disfrutaron de una lluvia de estrellas en el templo de Apolo y de un baño en una cascada escondida. Lejos de todos y de todo, Eda y Serkan protagonizaron un romántico momento.

Tras convencer a todo el mundo de que su historia de amor era real, a Eda y Serkan les tocó organizar una falsa fiesta de compromiso Sin embargo, no todo era mentira, puesto que los sentimientos del uno por el otro ya eran muy verdaderos en aquel momento. Eda, por su parte, comenzaba a darse cuenta de que algo había cambiado en su corazón... "Todo está ocurriendo tan deprisa que me mareo. Un hombre que no conozco me ha cautivado y me ha colocado en el centro de su vida arrastrándome a él", se decía a sí misma la florista antes del evento.

Aunque la conexión entre ellos era más que evidente, la pareja se tiró más de dos meses jugando al ratón y al gato hasta que llegó el día más esperado por su fiel audiencia. Eda tuvo que poner rumbo a Italia para que Serkan finalmente le confesara lo que sentía por ella. El arquitecto se lanzó a las calles de Estambul para interceptar a su amada antes de que se fuera en avión. "No dejo de pensar en ti. Te has adueñado de mí. Eda, no te vayas. Me he enamorado locamente de ti”, le dijo antes de besarla apasionadamente.

Después de cinco años separados y tras rehacer sus vidas, Eda y Serkan se reencontraron en el inicio de la segunda temporada ¡y la tensión ha sido más que evidente! Por un momento, los enamorados recordaron el gran amor que les unió en el pasado. Sin embargo, al arquitecto todavía le quedaba una sorpresa en camino: conocer a Kiraz, su hija.

Después de un día muy extraño que Eda no entendía lo que estaba ocurriendo y tras un viaje en coche que a Serkan le costó más de una regañina, llegó el momento que el arquitecto tanto había esperado. "Eda Yildiz, la estrella más hermosa de todas, la mujer más bella, el hada más mágica. Me has hechizado. Mi mente, mi corazón e incluso mi alma te pertenecen. ¿Quieres casarte conmigo?", le dijo Serkan a su chica, que no tuvo que pensarlo ni dos segundos para aceptar la propuesta de matrimonio. Lo que ella no esperaba es que la boda fuera a celebrarse más pronto de lo que pensaba ¡Justo en ese mismo instante!

Después de recuperar su empresa, Serkan recibió otra feliz noticia. Eda le estaba esperando en casa con un pequeño regalo: un sonajero. “Parece que esta casa será algo más ruidosa en los próximos meses”, dijo emocionada. El arquitecto estalló en alegría al conocer que pronto serían padres de nuevo. Esta vez quiso vivir cada instante del embarazo de su esposa en primera línea, al igual que Kiraz, quien esperó paciente la llegada de su hermanito.