El juicio por la custodia de Tadeo siguió adelante. Eduardo logró engañar al juez con unos documentos falsos que supuestamente probaban que había estado pasándole a su expareja la manutención que se le exigió: “Yo siempre he cumplido con mis deberes de padre y quiero que mi hijo viva solo conmigo, lo cuidaré bien”. Ariadna trató de demostrar que todo lo que estaba diciendo Falcón era mentira, pero se le hizo demasiado complicado.

Eduardo dio un nuevo golpe y pide la custodia completa de su hijo: “Me haré cargo de todo lo que necesita”. A pesar de sus esfuerzos, el tribunal rechazó su petición, pero tampoco consideró que Ariadna fuera una buena madre para el niño. Así que a ella también se le negó la custodia total. A partir de ese momento, el pequeño quedó a cargo del estado. Por primera vez desde hace mucho tiempo, los dos padres estaban de acuerdo en algo: la decisión que había tomado la corte era injusta.

Una nueva oportunidad

Por otro lado, Gael intentó arreglar las cosas con Dafne. Se había dado cuenta de que no podía vivir sin ella y sin los niños. “Tuve miedo de convertirme en el cabeza de familia. Eso fue lo que pasó”, reflexionó el joven. En un acto de valentía, trató de hablar con su exnovia y pedirle una segunda oportunidad, pero esta le dijo no sentirse libre para amar hasta que descubriera quién es el responsable de la muerte de su difunto Néstor. Su mundo se vino abajo cuando Juanjo, con muy malas intenciones, le hizo creer que fue Gael fue culpable del trágico accidente en el que falleció su marido.