Todo cambia en esta edición de Masterchef. Pepe Rodríguez, Samantha Vallejo-Nágera y Jordi Cruz retoman el control del talent culinario. Por primera vez, la competición será doble: entre los aspirantes y entre el jurado, porque Pepe, Jordi y Samantha serán mentores cada uno de un grupo de aspirantes durante la temporada, y se ocuparán de su formación y evolución.
En la última prueba de selección del casting, los 15 aspirantes que hayan conseguido el delantal deberán decidir con qué juez participarán, formándose así tres equipos con cinco candidatos. La reputación de los jueces y su ojo a la hora de reconocer el talento están en juego.
Entre otros desafíos, a los que se enfrentarán los aspirantes en esta edición, están el de trabajar a contrarreloj, enfrentarse en batallas, elaborar platos de estrella Michelin, preparar menús de boda o cocinar ante 210 comensales, la prueba de exterior con más invitados de la historia del talent culinario.
Chefs como Joan Roca, Elena Arzak, Pedro Subijana, Dabiz Muñoz, Quique Dacosta, Dani García, Francis Paniego, Eneko Atxa y Aitor Arregui entre otros, asesorarán a los aspirantes en las diferentes entregas. Y algunos de los invitados y antiguos concursantes, demostrarán que siguen siendo los reyes de los fogones: Ona Carbonell, Santiago Segura o el joven Josetxo, regresarán a las cocinas donde ya compitieron.
Más de 25.000 personas se apuntaron al casting y entre los seleccionados habrá un empresario nacido en Alemania que fue ciclista de un equipo profesional portugués, una interiorista y fotógrafa gallega, un exfutbolista reconvertido en pescadero que tuvo que dejar sus estudios de cocina por un problema familiar, un cerrajero forense y una administrativa de una marmolería que diseña lápidas.