Luisa (Inma Cuesta) y Alberto (Raúl Arévalo) se han visto abocados a irse a vivir al campo, pero la idílica vida rural enseguida empezará a mostrar su cara menos amable. A pesar de que la pareja no atraviesa por sus mejores momentos, Luisa está obsesionada con tener un segundo hijo, aunque el precio sea el sexo más apático imaginable.
Quien ni se plantea pisar el campo es Juan (Alberto San Juan), el hermano de Alberto, quien con 45 años y periodista en horas bajas, sale con Natalia (Irene Escolar), una joven entusiasta de 25 años en la que ve una tabla de salvación, aunque no haya previsto las locuras propias de su edad. Por su parte la hermana de Luisa, Sara (Candela Peña), está acostumbrada a canalizar su ansiedad a través de los hombres, con quienes no acaba de encajar, hasta que aparece Paco (Jorge Bosch), un periodista deportivo que parece incluso dispuesto a llevarla al altar.
Un buen reparto para una comedia romántica
Siete años después de llevar a la gran pantalla Salir pitando (2007), Álvaro Fernández Armero regresó al mundo del cine con Las ovejas no pierden el tren, penúltimo largometraje que ha realizado hasta ahora, ya que después rodaría Si yo fuera rico (2019). En la comedia que se emite esta noche, donde además de dirigir también se encargó de elaborar el guion, el realizador madrileño contó con un reparto de rostros muy conocidos en el panorama nacional.
Rául Arévalo e Inma Cuesta fueron los protagonistas de este filme, coincidiendo por segunda vez en un mismo proyecto, años después de rodar juntos Primos (2011). Como Raúl Arévalo, entre los miembros del reparto también destacaron otros dos ganadores del Goya, como es el caso de Candela Peña y Alberto San Juan, que ya habían compartido proyecto en La isla interior (2009).
Esp., 2014. Comedia. 103 min. Dir.: Álvaro Fernández Armero. Int.: Raúl Arévalo, Inma Cuesta, Alberto San Juan, Candela Peña, Jorge Bosch, Kiti Mánver, Irene Escolar, Pepo Oliva.