TNT presenta toda su oferta de series para la temporada 2016 / 2017

Buena conducta es un thriller intenso con altas dosis de seducción, engaños, crimen y relaciones peligrosamente adictivas.

Michelle Dockery (Downton Abbey) y Juan Diego Botto (Historias del Kronen) protagonizan la adaptación de la serie de novelas protagonizadas por la ladrona Letty Dobesh y escritas por Blake Crouch (Wayward Pines). Terry Kinney (Oz) y Lusia Strus (Wayward Pines) completan el reparto de esta primera temporada, de diez capítulos.

Letty Dobesh (Dockery) es una ladrona que vive al límite. Y lo hace por voluntad propia. Acaba de salir de la cárcel y está buscando la forma de salir adelante. Tiene que lidiar con un hijo de diez años que vive con su abuela y visitar regularmente al supervisor de su libertad condicional, que le aconseja sobre cómo superar sus adicciones y cuyos motivos para ayudarla no están demasiado claros. Pero el caos, que se resiste a abandonarla, regresa a su vida cuando se entera de los planes de un asesino a sueldo (Botto) que acaba de ser contratado para matar a una mujer.

Un joven William Shakespeare protagoniza esta producción que mezcla de forma innovadora las convenciones de las series de época con una estética y una banda sonora sorprendentemente contemporáneas.

El joven dramaturgo, interpretado por el debutante Laurie Davidson, aterriza en un teatro del Londres del siglo XVI en el que la escena punk-rock está en plena ebullición. Este entorno salvaje, atractivo y peligroso es el marco en el que se desarrolla esta visión contemporánea de la vida del joven Will, enmarcada en una música que suena atrevidamente actual.

El genio de Shakespeare no pasa desapercibido para Alice Burbage (Olivia DeJonge), la hija del carpintero cuyo objetivo es construir el primer teatro de Londres desde la época romana. El anhelo de Alice es triunfar en el teatro, algo no demasiado bien visto en la época. El reparto se completa con Mattias Inwood en el papel de Richard Burbage y Jamie Campbell Bower como el poeta Christopher Marlowe, el rival de Will. La serie cuenta con la producción de los creadores de Moulin Rouge, Elizabeth y Romeo y Julieta.

Un vuelo transoceánico. De repente, hay problemas y el avión se estrella en una isla desierta perdida en el mar. Los supervivientes solo tienen un objetivo: sobrevivir como sea dando lo mejor de sí mismos. O lo peor que llevan dentro.

Quizás este punto de partida suene conocido, solo que aquí no hay humo negro ni osos polares, pero sí mucha mala baba y humor a raudales. Los hermanos Justin y Jordan Shipley son los creadores de esta comedia que nace como un homenaje a Perdidos en clave de humor.

Los hermanos Shipley forman parte de una nueva generación de humoristas estadounidenses que se enfrentan al género con desenfado y propuestas frescas e innovadoras. En Superperdidos configuran una constelación de antihéroes peculiares, situaciones llevadas al extremo y perdedores carismáticos. La serie, que se ha situado en Estados Unidos como la comedia más vista en cable en el segmento de 18 a 49 años, ha renovado por una segunda temporada.

Chantal, una antigua compañera de universidad, ha desaparecido de repente y, a pesar de que no tenían una relación demasiado estrecha con ella, se obsesionan con el caso. Dory, Drew, Elliott y Portia no son detectives, son millennials de Nueva York cuya máxima preocupación era salir de fiesta, quedar para hacer un brunch o discutir
sobre sus cosas.

A partir de ahora todo cambiará para ellos. En la búsqueda de esa chica desaparecida en circunstancias extrañas, vivirán situaciones de auténtico peligro y se sumergirán en ambientes siniestros a los que antes no estaban acostumbrados.

Alia Shawkat (Arrested Development) encabeza un reparto que se se completa con John Reynolds (Stranger Things), Meredith Hagner (Veep) y John Early (Malditos vecinos 2). Además, esta comedia negra incorpora secundarios como la nominada al Oscar Rosie Perez (Sin miedo a la vida) y los nominados a los Globos de Oro Ron Livingston (Boardwalk Empire) y Parker Posey.

M. Night Shyamalan (El sexto sentido, Señales, Wayward Pines) es el responsable de Historias de la cripta, el bloque de terror inspirado en el clásico de EC Comics y cuya adaptación televisiva en los noventa se convirtió en una serie de culto.

Shyamalan actualiza esta antología que reúne historias de horror de todos los estilos y subgéneros. Una de las grandes incógnitas de esta nueva versión es el aspecto y la personalidad que tendrá El Guardián de la Cripta, el legendario anfitrión que presentaba cada uno de los episodios.

Eso sí, Shyamalan ha querido tranquilizar a los aficionados más recelosos asegurando que el personaje mantendrá el humor negro y la ironía. Serán diez episodios de treinta minutos cada uno, con historias que tendrán resonancias de la vieja serie y también con argumentos originales. Al más puro estilo Shyamalan, el terror psicológico teñirá algunos de los episodios, por ejemplo el titulado Creatures, protagonizado por dos hombres que salen del psiquiátrico en el que fueron ingresados tras haber tratado de arrancar el corazón a un compañero de clase en un rito sacrificial.

Han encontrado el remedio, luchado contra terroristas y locos sectarios, frenado el caos que amenazaba el país y extendido la vacuna. Todo parece volver al cauce normal, pero la paz no durará demasiado.

Tras el emocionante final de la segunda temporada, la tercera entrega nos traslada al continente asiático después de que al presidente Michener le lleguen rumores de que el líder chino está reteniendo la cura en lugar de distribuirla entre la población. El capitán Tom Chandler (Eric Dane) viaja a Asia para investigar esta acusación así como para averiguar si una posible mutación del virus original ha provocado una nueva infección en Japón. Si esto se confirma, las consecuencias para el planeta Tierra pueden ser fatales.

No todos los días se puede celebrar que una serie alcanza
diez temporadas en antena. Y Big Bang lo hace por todo lo alto,
convertida en la sitcom más vista en todo el mundo.

Los físicos más frikis siguen leyendo cómics, coleccionando figuritas y viendo series mientras tratan de llevar de la mejor manera posible sus vidas sentimentales y, en el caso de algunos, con la vista puesta ya en una paternidad muy próxima. La décima temporada empieza al día siguiente del último capítulo de la novena entrega, un episodio que reunió a la madre de Sheldon (Jim Parsons) y a los padres de Leonard (Johnny Galecki), y que contó con un trío de artistas invitados (Laurie Metcalf, Christine Baranski y Judd Hirsch) que lograron una nominación a los Emmy por su interpretación en esta serie.

En cuanto a incorporaciones, Katey Sagal y Jack McBrayer se meterán en la piel de la madre y del hermano de Penny, respectivamente. Sagal (Matrimonio con hijos) volverá a ser familia de Kaley Cuoco en la ficción, puesto que ambas ya fueron madre e hija en la comedia No con mis hijas.

“Para mí, esta ha sido siempre una historia sobre Ragnar y sus hijos”, asegura Michael Hirst, el creador y guionista de la serie.

Y precisamente los hijos del rey vikingo adquieren una mayor importancia en los diez episodios aún pendientes de estreno de la cuarta temporada, y también a lo largo de los veinte de los que constará la quinta.

Amor, odio, traición, venganza, lealtad, ira, deseo… Todas las emociones que han sido y son el motor de la humanidad se dan cita en Vikingos con toda la visceralidad que podamos imaginar.

A los actores con los que los seguidores de esta serie ya se han familiarizado, como Travis Fimmel (Ragnar), Katheryn Winnick (Lagertha), Clive Standen (Rollo), Gustaf Skarsgarrd (Floki), Alyssa Sutherland (Aslaug) o Alexander Ludwing (Björn), se unirán en la quinta temporada intérpretes como el ex luchador de wrestling Adam Copeland y el prestigioso Jonathan Rhys-Meyers, conocido por sus trabajos en series como Los Tudor y películas como Match Point.

Las aventuras fantásticas de Las crónicas de Shannara se han convertido en uno de los grandes éxitos de la temporada televisiva.

Elfos, humanos, druidas, demonios, trolls… Todo tipo de criaturas se dan cita en la saga ideada por el novelista Terry Brooks, el tercer autor en activo con más ventas en el género de la literatura de fantasía, solo por detrás de J.K. Rowling (Harry Potter) y George R.R. Martin (Juego de tronos).

La serie transporta al espectador a un futuro postapocalíptico en el que la tecnología ha perdido su preponderancia y la magia se abre paso. Parece que la amenaza que suponía el Dagda Mor y su horda de demonios ha sido frenada temporalmente gracias al sacrificio de la princesa Amberle,
pero otros peligros esperan al aguerrido semielfo Will (Austin Butler), a la seductora ladrona Eretria (Ivana Baquero), al druida Allanon (Manu Bennett) y al resto de héroes que han cautivado a la audiencia.

El desenlace de la segunda temporada ha dejado a los seguidores de la serie con la incertidumbre de saber qué ocurrirá en la nueva entrega de The Flash. Barry ha viajado atrás en el tiempo para salvar a su madre y con ello ha alterado el rumbo de la historia. ¿Y ahora qué? ¿En qué realidad se encuentra? ¿Conserva sus poderes? La saga de cómics Flashpoint sirve de inspiración para el inicio de esta temporada.

La serie, creada por Greg Berlanti (Arrow, Supergirl), cuenta con Grant Gustin, Candice Patton, Tom Cavanagh, Carlos Valdés y Danielle Panabaker como protagonistas. La quinta temporada incorpora a nuevos velocistas, como es el caso
de Wally West convertido en Kid Flash; cameos superheroicos, como el de Supergirl; directores invitados que repiten en la serie, como Kevin Smith (Clerks, Mallrats), y nuevos personajes, como el interpretado por Tom Felton (Harry Potter).

El crimen nunca descansa y en la policía de Los Ángeles lo saben muy bien. El equipo liderado por la capitana Sharon Raydor (Mary McDonnell) regresa con una nueva entrega de 13 capítulos. Con la veteranía que le confieren sus cinco temporadas, Major Crimes es ya una de las series procedimentales más sólidas de la televisión. Junto a McDonnell, el reparto de este spin-off de The Closer se completa con G.W. Bailey, Tony Denison, Michael Paul Chan, Raymond Cruz y Kearran Giovanni.

Nadie puede resistirse a su sonrisa, a su manera de tratar a la gente y a esa capacidad de análisis única que le permite resolver los casos más enrevesados. La detective Annalise Villa (Jaina Lee Ortiz) es el contrapunto perfecto a la personalidad arrolladora de Rosewood. Es necesario alguien con su decisión y sus métodos expeditivos para equilibrar la fórmula y formar una pareja con mucha química.

Color, sol, música, fiestas en la playa, narcotráfico, venganzas, lucha de bandas, homicidios… La vida para la policía de Miami nunca resulta aburrida y mucho menos si Rosie entra en escena. Su relación con Villa no atraviesa el mejor momento, y muy pronto descubriremos hacia dónde se dirige. No es la única incógnita de un final de temporada que también dejó en el aire el futuro del romance entre Pippy (Gabrielle Dennis) y TMI (Anna Konkle).

Viajes en el tiempo, realidades múltiples, alienígenas de todo pelaje y condición, inventos locos, mucho humor y un ligero toque de amarga realidad.

La mejor serie de ciencia ficción del momento se presenta en formato animado por obra y gracia de Dan Harmon (Community) y Justin Roiland, una pareja que ha creado un universo hipnotizante de chistes incorrectos, momentos delirantes, guiños a la cultura pop, personajes extravagantes y tramas que, bajo su superficie, esconden mucho más de lo que parece a primera vista.

El humor disparatado de Robot Chicken regresa una temporada más de la mano de sus creadores Seth Green (Padre de familia) y Matthew Senreich.

La serie de Adult Swim utiliza la técnica de la animación stop-motion para parodiar todo tipo de referentes de la cultura de masas. Cine, videojuegos, celebridades, cómics, series de televisión… Nadie se escapa de la trituradora de sus creadores y del doblaje chanante en la versión española a cargo de Joaquín Reyes.

Mom es una de las propuestas más atrevidas del panorama actual de la comedia norteamericana. A una excelente pareja de protagonistas, se une un amplio abanico de secundarios carismáticos y la habilidad de unos guionistas que se atreven a introducir temas delicados en el transcurso de la serie. Los momentos hilarantes que proporcionan las aplaudidas Allison Janney y Anna Faris se mezclan con toques agridulces que le dan motivos de reflexión al espectador en esta serie ideada por Chuck Lorre, el creador de Big Bang.

Kat Dennings y Beth Behrs son Max y Caroline, dos chicas con grandes aspiraciones en la vida y en los negocios que necesitan un poco de suerte… y también algo de dinero. ¿Cuándo llegará el día en que los éxitos les duren algo de tiempo? Por intentarlo que no quede. Humor descarado y sin complejos en una sexta entrega que, además de con el dúo protagonista, cuenta con Jonathan Kite (Piratas del Caribe) como Oleg, Matthew Moy (Sin compromiso) en el papel Han y Jennifer Coolidge (American Pie) como la peculiar Sophie.

Rashida Jones (Parks and Recreation) es Angie Tribeca, una agente de la Unidad de Crímenes Realmente Abominables de la policía de Los Ángeles. La comedia creada por Steve y Nancy Carell es una parodia alocada de las series policiacas trufada de humor absurdo, personajes excéntricos y situaciones delirantes en la que los gags se suceden a toda velocidad en la tradición de títulos como Aterriza como puedas. Heather Graham, Alfred Molina, James Franco, Joe Jonas o Noah Wyle, entre otros, hacen cameos esta temporada.

Si algo puede salir mal, saldrá mal, como se puede comprobar en esta comedia alocada llena de casualidades sorprendentes, personajes estrambóticos y malas decisiones. En la segunda temporada, la acción se traslada a Nueva York. Nate (Jason Jones) intenta buscar un nuevo punto de partida y reconstruir su familia. El reparto se completa con Natalie Zea, Ashley Gerasimovich y Liam Carroll. La serie está creada, escrita y producida por el propio Jason Jones y por Samantha Bee, una de las humoristas de moda en EE.UU. gracias a su programa satírico Full Frontal with Samantha Bee.

Los premios Emmy han reconocido la excelente segunda temporada de Black-ish nominándola a mejor serie de humor y a sus dos protagonistas principales, Anthony Anderson y Tracee Ellis Ross, en las categorías de actor y actriz de comedia. Pero además de aportar un humor fresco y desenfadado, la serie no se olvida de tocar temas controvertidos como el de la violencia policial. Una comedia que es, además, un retrato de la sociedad estadounidense a través de la mirada de una familia afroamericana en un barrio de blancos.