La infanta Elena, en calidad de presidenta de honor de la fundación Special Olympics, presidió la gala anual de esta organización sin ánimo de lucro que pone el foco de atención en las personas con discapacidad intelectual. En el acto se hizo entrega del premio Special Olympics España. Un galardón especial con el que se conmemoraba el 50º Aniversario de la Fundación Special Olympics International. Y como la ocasión requería, la duquesa de Lugo se puso sus mejores galas. La infanta llegó al evento, celebrado en el Auditorio Bankia de las Torres Kio de Madrid, con un abrigo de terciopelo negro y un fular de cuadros que nada hacía pensar el modelo de blusa que llevaba debajo.
Fue dentro del acto, donde pudimos ver el detalle más llamativo de su estilismo: una blusa negra con flores en la parte delantera, cuello redondo y mangas transparentes negras que acababan rematadas en puños verdes, a juego con el tono de las hojas de las flores de su top.
La duquesa de Lugo apostó todo a su camisa, que combinó con pantalones y zapatos negros. Pero dejó también algo de protagonismo a su bolso. Se trataba del modelo Saddle de Dior con estampado con motivos también florales. Un icono que la firma francesa creo en los noventa y que ha día de hoy sigue enamorando a las amantes de la moda.
A diferencia de otras ocasiones, la primogénita de los reyes eméritos llevaba un llamativo maquillaje con sombras metalizadas y labios color fresa. Y luciendo la mejor de las sonrisas.
Se trataba del primer acto público de la infanta, tras los actos conmemorativos del 40 aniversario de la Constitución Española, el pasado 6 de diciembre. A los que no asistió porque, por Ley, ya no pertenece a la Familia Real. De hecho, no acude a la Tribuna Real en el desfile del Día de la Hispanidad desde 2012.
