El príncipe Guillermo aterrizó el pasado lunes en Tel Aviv para comenzar el primer viaje que un miembro de la Casa Real británica realiza oficialmente a Israel y a Palestina, como parte de una gira por Oriente Medio que empezó en Jordania. Este viaje lo hace sin la compañía de su mujer, Kate Middleton, y es que la duquesa de Cambridge está de baja maternal tras dar a luz a su tercer hijo, Luis.
Entre los actos oficiales que tiene previstos en su agenda de estos días por el Medio Oriente, el duque de Cambridge ha asistido a un partido de fútbol entre niños árabes y judíos promovido por la organización The Equalizaer y el Centro Peres para la Paz.
En compañía del futbolista israelí Tomer Hemed, Guillermo participó en una tanda de penaltis con los chavales que participan en un programa que trata de lograr el entendimiento entre los dos estados a través de un programa de deporte y social.