Isabel Gemio cuenta, por primera vez, la historia de amor y dolor que ha vivido al lado de su hijo Gustavo. La presentadora publica 'Mi hijo, mi maestro', un libro en el que narra cómo es su vida al lado de su hijo mayor, que cumple 22 años el próximo 30 de octubre, que padece distrofia muscular. En esta obra, la periodista ofrece un testimonio desgarrador y emocionante de cómo vivió el diagnóstico de Gustavo y cuenta cómo es su vida cotidiana al lado de un chico que, a pesar de estar condenado a una 'quietud de hierro', no pierde la paciencia ni se revela contra el mundo. Isabel no está sola en su relato. En este libro, que se concibe como el homenaje de una madre valiente a un hijo enfermo, también hay voces de otras madres con historias similares y especialistas que ayudan a entender la realidad de los niños que sufren esta enfermedad.
"El rumbo de mi vida cambió definitivamente cuando el 22 de septiembre me comunicaron el diagnóstico de la enfermedad de Gustavo, mi primer hijo, que el 30 de octubre cumpliría dos años. Pero el azar o el amor quisieron que no estuviera sola para recorrer aquel camino complicado y confuso. Estaba embarazada de cinco meses. En mi vientre, estaba Diego cuando me dieron el diagnóstico. Me resulta difícil trasladar con palabras las sensaciones que llegué a sentir sabiéndome embarazada ante el cúmulo de acontecimientos que sucedían en mi vida. El 'yin' y el 'yang', dos energías opuestas que se necesitan y se complementan, definirían mi vida futura. Mi dolor era tan hondo que me preocupaba cómo éste repercutiría en mi bebé" explica Gemio en su libro cuya publicación coincide con el décimo aniversario de la creación de la fundación que lleva su nombre y que se dedica a la investigación de distrofias musculares y otras enfermedades poco frecuentes.
"Dos palabras cambiaron mi vida para siempre: distrofia muscular. Mi hijo estaba enfermo y su enfermedad era una de las más crueles que existían. Se iría quedando sin fuerzas en sus piernas y brazos, además sufriría muchas complicaciones en pulmones y corazón. Estaba paralizada, sin saber cómo afrontar lo que me ocurría. No obstante, la vida seguía y debía esforzarme por vivirla de la mejor forma posible. Gustavo se lo merecía. Él era la vida y estaba a mi lado para recordármelo", escribe la periodista en su libro que presenta en Madrid el 9 de octubre.
Isabel destaca en su obra la lucha constante de Gustavo. "Vivimos momentos de gran intensidad y sufrimiento, pero lo que más me animaba era su predisposición a recuperarse y seguir luchando. Si él no se quejaba, por qué íbamos a hacerlo los demás. Un día, Diego, conmovido por la dificultad de Gustavo para caminar con aquellos hierros, le dijo que si él pudiera le daría sus piernas y lo que necesitara para que no estuviera enfermo" cuenta.
En 'Mi hijo, mi maestro', Isabel muestra un amor incondicional por sus dos hijos y aclara por qué, cuando confesó que uno de ellos estaba enfermo, no aclaró cuál de los dos era. "No siento ni la más ínfima diferencia entre lo que significa ser madre biológica o adoptiva. No puedo amarlos más de cuanto los amo, y por los dos daría mi vida. Por ellos sufro, renazco y muero. Por ellos busco la luz entre las sombras. Por ellos, la vida, la alegría y la enfermedad. No amo a un hijo más que al otro, por tanto, si uno sufre, sufro con él como solo las madres llegamos a sufrir. Y punto" cuenta. 'Mi hijo, mi maestro', de la editorial, La Esfera de los Libros, ya está a la venta desde 19,85 €. COMPRAR