Como cada 31 de diciembre, el rey Harald se dirigió a sus ciudadanos con un discurso en el que este año Ari Behn se convirtió en el protagonista. El exyerno del soberano y padre de sus nietas Maud, Leah y Emma se quitó la vida el pasado 25 de diciembre dejando a la familia devastada. Y lejos de querer obviar ese asunto, Harald V habló sobre el tema, mostrando ante los noruegos cómo están viviendo estas fechas.
"Muchos de nosotros estamos entrando en el nuevo año con tristeza en nuestros corazones. Pero nos queda la esperanza", confesaba el monarca. "Estamos fuertemente tocados por la muerte de Ari Behn esta Navidad. Ha sido cálido experimentar la compasión de muchas personas y verlas encender velas en la Plaza del Palacio", continuaba el rey.
"Sabemos muy poco sobre lo que está por venir. La incertidumbre nos hace a todos vulnerables. Lo mejor que podemos hacer es estar unos con otros, vernos, recordar decirnos buenas palabras. Mis pensamientos esta noche están especialmente con todos aquellos que salen del año viejo con un triste vacío porque falta alguien con quien estaban felices", así finalizaba su discurso el monarca. Ari Behn siempre vivió perseguido por la polémica, y aunque en un principio a los reyes no estuvieron muy de acuerdo en que su hija saliera con el escritor, finalmente consiguieron quererlo como un hijo más, y ahora lloran su muerte. Tanto es así que la reina Sonia ha decidido cancelar su agenda hasta que no tenga lugar el funeral, que se celebrará el próximo 3 de enero en la catedral de Oslo.
