- Samira Jalil se ha enfrentado al espejo del alma.
- La concursante se ha derrumbado al recordar la muerte de su madre.
'La casa fuerte 2' está que arde. Los concursantes no paran de darnos momentazos. No obstante, entre tanta discusión, siempre hay un hueco para la emoción. Y, sin ninguna duda, Samira Jalil ha sido la encargada de hacernos llorar durante la última gala del reality. La concursante argentina ha sido la encargada de hacer el espejo del alma durante el último programa de 'La casa fuerte 2: Código secreto'. "Sigo viendo a una niña caprichosa, a veces egocéntrica, que ya es una mujer de 30 años. A veces déspota, a veces soez... pero a la que el alma y el amor le han vencido en varias ocasiones", empezó diciendo la participante.
Tras esto, la joven no pudo aguantar las lágrimas al enfrentarse a la palabras 'soledad': "He sido y soy una mujer con miedo a la soledad y al fracaso que ha buscado el amor y el hogar que a veces le han faltado. Por mi personalidad me he sentido sola, pero por la herencia de mi madre, que son mis hermanos, no he estado nunca sola".
Pero, si hay un momento en el que Jalil se ha derrumbado por completo ha sido al recordar la muerte de su madre. "Con esta palabra me dan hasta ataques de ansiedad. Desde que murió mi madre tengo muchísimo miedo a perder a mis hermanos y al resto de mis seres queridos. La vida a veces es muy injusta y se lleva a personas que no se tenían que haber ido", confesó, muy afectada.
Por último, la joven reveló el motivo por el que quiere ganar el reality. "Quiero ganar el concurso para construirle una casa a mi hermana en Argentina, que vive con mis cinco sobrinos en unas condiciones en las que no debería vivir. Quiero comprar un terrenito para ella, no se merece vivir así. Quiero que puedan dormir calentito y que no duerman más con ratas. Quiero ganar todos los concursos por ello, sin miedo a nada y sin importar lo que me digan".