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La periodista Sara Carbonero está en medio de uno de los viajes más especiales de su vida, pero también está siendo el más complicado, y es que la situación que se vive en la selva del Darién, donde se encuentra, es sobrecogedora. Como embajadora de Buena Voluntad de UNICEF, la ex de Iker Casillas ha querido irse a este punto neurálgico de las rutas migratorias de Sudamérica que es, además, uno de los más duros, no sólo por su peligrosidad, sino porque se estima que sólo en los cuatro primeros meses de este año, más de 30.000 niños intentaron cruzar este lugar entre las fronteras de Colombia y Panamá en busca de un futuro mejor.
Sara, completamente devastada por esto -ya que es un tema que le toca muy de cerca, pues ella misma tiene dos niños pequeños, Martín y Lucas, de 10 y 8 años respectivamente-, ha querido dar visibilidad a esta situación para que la gente apoye el trabajo de UNICEF en estas zonas tan tensionadas con donaciones: "Quería comprobar de primera mano cómo es su labor aquí, cómo llega la ayuda, quería conocer los testimonios de las familias, conocer su realidad, cómo ha sido esa travesía, saber qué necesitan y cómo ayudarles, y servir de altavoz para que llegue su mensaje", ha relatado.
Completamente impactada tras conocer los detalles, Sara se ha mostrado consternada tras conocer las historias: "Lo que más me ha impactado es la cantidad de niños y niñas que han sido capaces de hacer esta ruta migratoria terrible y llegar con vida a su destino, porque es una ruta salvaje en la que hay todo tipo de obstáculos [...]. Hay grupos armados, todo tipo de agresiones, falta de agua potable, comida... si para un adulto es difícil, imaginaos esas criaturas tan chiquititas. Llegan en condiciones muy críticas, desorientados y con miedo. Eso es lo que más se me marca, sus miradas y los abrazos que te dan, porque están totalmente desubicados".
Sara también ha querido poner el foco en la situación de desbordamiento que se vive en estos campamentos de migrantes refugiados: "Son miles y miles las personas que llegan al día, pero gracias a UNICEF se puede sostener esto de alguna manera", ha relatado.
Este viaje, además, lo ha hecho en un momento difícil para ella, pues en mitad de esta travesía ha perdido a una persona muy querida.
