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Anabel Pantoja se compromete a no volver a hacer algo que perjudica a algunas personas. La sobrina de Isabel Pantoja recupera la normalidad de su vida en Gran Canaria tras pasar unos días entre su Sevilla natal y Córdoba, la tierra de su chico, David Rodríguez. En tierras canarias, donde la creadora de contenido ha establecido su hogar junto al fisioterapeuta y su hija Alma, que nació el pasado 23 de noviembre, ha encontrado la felicidad y comparte, con naturalidad, su día a día en sus redes sociales.
Y es que la naturalidad de Anabel Pantoja es una de las claves de su éxito y, en sus redes sociales, tanto bromea con que le ha 'puesto los cuernos' a su chico por contratar a un fisioterapeuta a domicilio como comparte una de sus recetas favoritas.
Anabel Pantoja, arrepentida por ir a un centro comercial cuando están a punto de cerrar
En esta ocasión, Anabel Pantoja, que hace unos días también compartió el accidente doméstico que sufrió y las quemaduras tras un día de playa, ha compartido un gesto del que no está muy orgullosa pero que ha prometido cambiar. Ella misma compartía unos Stories en los que llegaba a un centro comercial siendo noche cerrada, cuando estaban a punto de cerrar, y pedía perdón por adelantado a los trabajadores. "Todos mis respetos al personal que trabaja en centros comerciales hasta las 22.00 luego tienen que cerrar y llegar a casa. Me comprometo a no hacerlo más y llegar a una hora prudente", escribió.
Anabel Pantoja compartía unas imágenes en las que explicaba que tenía que ir a cambiar unas compras que había hecho en Lefties y se la veía entrando en la tienda a las 21.45 horas, cuando quedaban solo 15 minutos para cerrar el centro comercial. La creadora de contenido explicaba que ésta era una de sus tiendas favoritas para comprarle ropita a Alma, que se parece mucho a su padre David Rodríguez, porque tenían ropa muy mona para la niña y se preocupaba por la cara que le iban a poner las dependientas cuando vieran todo lo que tenía que cambiar y que era casi la hora de cerrar. La influencer se ha comprometido a, la próxima vez, ir a una hora más decente a un centro comercial.
