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Llegó a la televisión por casualidad, pero ha demostrado con creces que vale para estar delante de las cámaras. Hace año y medio, Kike Quintana empezó en el programa de su tía, 'TardeAR', y se convirtió en uno de los colaboradores más queridos por su ácido y gamberro sentido del humor. Ahora se ha independizado de Ana Rosa Quintana y está feliz de contar con más minutos de pantalla. Kike llega a nuestra producción en moto y se muestra tan natural con todo el equipo como se le ve en televisión. Tanto que nos cuenta sus secretos de belleza.
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Tú llevabas años trabajando detrás de las cámaras y un día te proponen ponerte delante. ¿No te dio vértigo el cambio?
Me pareció una oportunidad, empezar algo que podía ser muy divertido, muy chulo. Es verdad que tengo un carácter muy dicharachero y siempre me habían dicho que tenía ahí un filón para explotar.
Ahora que ya no trabajas con Ana Rosa, ¿la echas de menos?
No (risas), pero creo que es absolutamente recíproco. Yo echo de menos el verla a diario. Ella es mi segunda madre y me gustaba tenerla todos los días y poder contarle mis cosas. Pero para mí es una oportunidad de poder crecer hasta donde sea, independizado. Como cuando los niños se van de casa de sus padres.
Cuando os veis, ¿habláis de trabajo?
Normalmente no, en el 90 por ciento de los casos hablamos de otras cosas.
¿Te cansas de que te pregunten por ella?
¡Para nada! Es lo lógico. Yo soy un recién llegado en esto de la televisión y mi imagen está unida a la de Ana Rosa. De hecho, a mí cuando me paran por la calle, siempre me preguntan ¿tú eres el sobrino, no? Totalmente feliz de que me vinculen a ella.
¿Alguna vez has notado que tus compañeros te hacen la pelota por ser el sobrino de…?
No lo sé… He notado gente que es más cariñosa y otra que lo es menos. Pero vamos, a mí me acompaña un apellido del que estoy absolutamente orgulloso, pero no tengo poder sobre nada. Es decir, quien me haga la pelota no va a cambiar de estatus.
¿Cuál crees que es el secreto de Ana Rosa para seguir siendo la reina de las mañanas?
Que no tiene pelos en la lengua. No hay dobleces en su discurso. O la quieres o no te gusta, pero ella dice lo que piensa, sin medias tintas.
Tú tampoco tienes demasiado filtro…
Somos una familia peculiar. Procuramos no tenerlos. Nos decimos las cosas, pero intentamos hacerlo con cariño. Curiosamente, mi tía no se mete en mi trabajo, nunca me comenta si le gusta o no. En cambio si voy a su casa y le espanta como voy vestido, me puede decir 'madre mía, vienes hecho un cuadro'.
El otro día dijiste que os estáis pareciendo al clan Campos. Y que tú te pedías a Carmen Borrego.
Es mi debilidad (risas). Me hace mucha gracia, me cae muy bien y la llamo mi musa.
¿Cómo estás viviendo esta nueva etapa de 'TardeAR'?
Está siendo súper ilusionante. El programa está funcionando sin la jefa y para mí está suponiendo un crecimiento. Tengo más minutos y me siento más asentado.
¿Cómo recuerdas tu infancia?
De pequeñito era mucho más tímido, pero siempre he sido bastante rápido de mente. Y esa rapidez me servía para abrirme a los demás a través del humor. Que es básicamente lo que hago ahora delante de la tele (risas).
Puestos a soñar, ¿te pones algún límite en lo laboral?
Yo no me lo pongo, pero ahora estoy en un momento de disfrutar lo que me está pasando porque estoy muy cómodo y contento. Me lo paso como un enano. Prefiero no pensar en el futuro porque podría amargarme. Vete a saber si dentro de tres años nos encontramos y estoy vendiendo seguros.
¿Luego vuelves a ver el programa cuando acaba?
A no ser que haya hecho algo muy gracioso que quiera enseñárselo a mi chica, nunca lo visiono después. Lo que hago, ahí se queda. Me parecería enfermizo.
De todos los colaboradores con los que trabajas, ¿con quién te irías de cañas?
Con los presentadores (Frank Blanco y Verónica Dulanto), que me llevo muy bien.
¿Y a quién mandarías a 'Supervivientes'?
A Leticia Requejo, nos daría grandes momentos. Es un personaje interesante.
Has cambiado mucho físicamente. ¿Te animarías a hacer el reto 'Men’s Health'?
¡Sí! Aunque yo era más goloso cuando estaba como un zurullo. Os recuerdo que Frank Blanco hizo el reto y es la única portada de 'Men's Health' donde el protagonista sale con camiseta. Para mí sería maravilloso hacerlo y superarle. Yo creo que haría casi todo, hay que aprovechar las oportunidades.
¿Te meterías en un reality?
Chica, nunca se sabe. Todo es negociable en esta vida (risas). 'Supervivientes' me parece un reality súper chulo, pero lo de pasar hambre lo llevo fatal.
¿Cómo eres cuando no estás en pantalla?
Creo que mi mayor virtud es la lealtad. Soy muy transparente y eso es un defecto porque si me caes bien, se nota. Pero si me caes mal, también. Eso laboralmente es un problema.
¿No consigues disimular?
No, de momento no (risas), tengo que trabajar en ello.
Hace poco te casaste con tu chica, Cristina. ¿Tienes ganas de aumentar la familia?
Sí, el problema es que no nos vemos mucho, que está muy bien porque no discutimos. Pero, por supuesto, a mí me encantaría ser padre.
¿Qué tipo de padre crees que serías?
Yo creo que consentidor. Sería un padrazo. Voy de tipo duro, pero soy un pedazo de pan. Como ves, ¡me lo digo yo todo! No tengo abuelas.
¿Os ha cambiado en algo lo de pasar por el altar?
No, no hay ninguna presión añadida por tener un anillo en la mano. Lo que más me gusta en el mundo es que llegue el fin de semana y poder contarnos las cosas y tener tiempo de calidad.
¿Compartís sentido del humor?
Sí, mi mujer es mucho mejor que yo en todo, pero tiene un sentido del humor muy parecido al mío. Casi siempre estamos de broma.
¿Os conocisteis en la tele?
No, ella es enfermera. Nos conocimos por redes sociales, que es la solución cuando no tienes tiempo.
Diez Minutos se cita con Kike Quintana en... Hotel Hyatt Regency Hesperia
La producción se realizó en el precioso hotel Hyatt Regency Hesperia Madrid, un establecimiento cinco estrellas situado en el Paseo de la Castellana, 57. Su situación es ideal para todos los planes que ofrece la capital. 912 108 800.
Ayudante de fotografía: Asun Penalva | Maquillaje y peluquería: Javier Reyes | Estilismo: María Álvarez | Agradecimientos: Hotel Hyatt Regency Hesperia Madrid.
María Larrocha es experta en cine, música, libros y temas relacionados con ecología y sostenibilidad. Y sobre todo, redactora de noticias del corazón, mundo en el que lleva con mucho orgullo desde 2004. ¿Quién no se relaja leyendo el día a día de nuestros famosos? Ahora disfruta escribiendo sobre las ‘celebrities’ en Diez Minutos, donde también te cuenta los planes que no te puedes perder o cómo poner nuestro granito de arena para hacer un mundo mejor.
Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid, empezó en la sección de Cultura de La Razón, para después trabajar en la radio, recalar como correctora en El Mundo durante unos meses y marcharse un año a Inglaterra para perfeccionar el inglés. De vuelta a Madrid aterrizó en la revista Qué me dices!, dónde aprendió que se puede hacer periodismo sin perder el sentido del humor.
