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Rocío Carrasco y Rocío Flores llevan 13 años sin verse las caras y sin cruzar una sola palabras, pero este 23 de junio el contador se ha puesto de nuevo a cero, pues madre e hija han tenido que coincidir en una sala de la Audiencia Provincial de Madrid. Tal y como estaba previsto, ambas se han presentado ante el tribunal, al que acudían en calidad de testigo y demandante respectivamente por la demanda que Flores presentaba contra la productora 'La fábrica de la tele' -ahora 'La Osa Producciones Audiovisuales'- tras la emisión del mediático y polémico documental 'Rocío: contar la verdad para seguir viva' en el año 2021. A su llegada, ninguna de las dos ha querido hacer declaraciones al respecto.
El programa supuso no sólo un éxito de audiencia para Telecinco, pues Rocío Carrasco rompía su silencio tras 20 años callada sobre la mala relación con su familia y su nulo contacto con sus dos hijos, Rocío Flores y David Carrasco; el documental también fue una catarsis para la hija de Rocío Jurado, y conseguía reescribir la historia que Antonio David Flores había contado al mundo sobre la madre de sus dos hijos mayores, pero igualmente también vio un resquicio por el que cabía una demanda, y fue ni más ni menos que la publicación de documentos policiales y judiciales, considerados como confidenciales, que señalaban directamente a Rocío Flores por el famoso episodio que desencadenó en un grave incidente entre madre e hija en 2012 por la que la joven fue sentenciada, y que supuso el principio del fin de su relación.
Estos papeles, que Rocío Carrasco puso en manos de la productora y sobre los que habló largo y tendido, incurrirían en un presunto delito de vulneración de la intimidad y también en una supuesta revelación de secretos agravada, pues Rocío Carrasco mostró informes psicosociales, atestados policiales y sentencias judiciales, y también documentos de la Agencia para la Reeducación y Reinserción del Menor Infractor, sin el consentimiento expreso de su hija, que por aquel entonces era menor. Esta es la baza que el equipo legal de Antonio David Flores y Rocío Flores va a jugar ante el juez.
Por otro lado, Rocío Carrasco ha acudido, como decíamos, en calidad de testigo para defender a la productora, y su línea de defensa es muy clara: se escudan no sólo en que contaban con el consentimiento de una de las partes involucradas para emitirlo, sino también en que algunos de los citados documentos que se vieron en la docuserie ya habían sido publicados por otros medios anteriormente, y aquel caso, que también fue judicializado, fue archivado. Ahora, el recurso obliga de nuevo a la productora a enfrentarse a si, efectivamente, se vulneraron los derechos de Rocío Flores o no, y por lo que la joven reclama una indemnización de un millón de euros.
