La semana pasada, en el los capítulos 21 al 25 de 'La Moderna', Madrid amaneció con la noticia en los periódicos de que el empresario Balbín había aparecido muerto de un disparo en la sien. En los capítulos 26 al 29 de 'La Moderna' de esta semana, Laurita empezó a ampliar sus conocimientos y responsabilidades en el Salón de té a la misma velocidad que su relación con Fernando Collado comenzó a despegar, gracias al buen hacer que la joven demostraba en el cine. Elías quedó creyendo que las dos notas que encontró en el local estaban escritas por Laurita para él.

Íñigo solicitó un descanso de sus obligaciones a don Jaime para poder visitar el cuartel donde teóricamente estuvo preso su némesis Aguirre. Las aguas se agitaron en la corrala, ya que Rosario se quedó sin una de las escaleras que limpiaba, Luisa tuvo que enfrentarse a Raimundo debido a Emilio, y Manuel parecía no ser quien decía ser.

Hubo júbilo en La Moderna ante la vuelta de Antonia después de que don Fermín le concediera un indulto laboral y la readmitiera. Cañete se sintió lo suficientemente confiado como para pedirle una cita a Trini, y Laurita hizo chistes a expensas de Teresa para hacer reír a sus compañeras. En la corrala, Pablo comenzó a sospechar de Manuel por la forma en que le consiguió otra escalera a su madre. Manuel, por su parte, aceptó un nuevo trabajo con Raimundo, lo que inquietó a su hermana Luisa, quien a su vez, salió a dar un paseo con Emilio, lo que despertó sentimientos similares en Raimundo.

La corrala fue testigo de la salida de Marta, quien escapó de la casa de Antonia

Íñigo empezó a sospechar que Aguirre podría estar muerto, pero si eso fuera cierto, ¿quién le estaba enviando las amenazas que estaba recibiendo? Antonia no pudo soportarlo más y decidió salir a buscar a Marta por Madrid para tratar de dar con su paradero. Mientras tanto, en el hogar de sus vecinos del bajo, los Garcés, Pablo arremetió contra Manuel. Además, Luisa encontró el dinero que Pablo tenía escondido en casa, proveniente de sus actividades ilegales con Raimundo.

Doña Carla, una mujer decidida, no permitió que Matilde e Íñigo sospecharan de ella como la persona que le estaba enviando anónimos a Íñigo. Para desgracia de Trini, ahora no solo tuvo que lidiar con el comportamiento de Cañete, sino que Elías también tenía su dirección. La corrala fue testigo de la salida de Marta, quien escapó de la casa de Antonia. Manuel no quería perder a Matilde debido a Íñigo, por lo que fue él quien ahuyentó al acosador de Matilde y luego tuvo un gesto amable con ella. Además, la corrala seguramente se enteró de la discusión que don Jaime tuvo con Íñigo en la galería, al reprocharle la relación que seguía manteniendo con su esposa.

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Pilar Martínez

Pilar Martínez es periodista especializada en contenidos de televisión y cultura, se graduó en la carrera en Periodismo en la Facultad de Ciencias de la Información (Universidad Complutense de Madrid) en el año 2018. Desde entonces ha pasado por las redacciones de Ecoteuve (El Economista), donde realizó sus primeras prácticas durante el verano del 2016.

Posteriormente, concretamente, en el año 2017 se pasó al grupo Hearst España, donde comenzó su andadura en las revistas de televisión: Supertele, Teleprograma, Telenovela. Ahora colabora con Diez Minutos, en su versión web, donde se encarga de realizar los avances semanales de las ficciones diarias de moda, así como entrevistas y artículos sobre los melodramas o telenovelas que aterrizan en nuestro país y aquellos que están por venir.

Toda una cazadora de exclusivas. A esto, se suma su puesto como redactora jefe de la sección de novela narrativa en la revista Culturamas, medio digital de alto impacto al que lleva unida desde el año 2013. Ávida lectora, cinéfila y seriéfila de primer nivel, ha hecho de su vocación su oficio.