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'Supervivientes 2025' está cada vez más tenso, y es que después de un mes de concurso pasando hambre, frío y varios temporales, los concursantes están llegando al límite poco a poco, y aunque debía ser una noche emocionante con la esperada unificación, lo cierto es que no salió todo como se esperaba: volver a ver a compañeros que habían sido eliminados podría producir cierta alegría a los concursantes, pero con lo que no contaban era un 'pequeño' detalle: que Manuel González seguía allí, entre ellos, en Playa Misterio. Y Anita, al verle, no se lo ha tomado nada bien.
A pesar de que el concurso de Anita y Montoya empezó al lado de Manuel, y tuvieron sus momentos de rifirrafes pero también de entendimiento, cuando la catalana y el sevillano se incorporaron al concurso como participantes oficiales quizá pensaron que a Manuel le habían mandado a su casa... pero no. Y este martes, durante la emisión de 'Tierra de nadie', ninguno de los dos pudo ocultar su sorpresa en el reencuentro. Sin embargo, para quien supuso todo un cúmulo de emociones fue especialmente para Anita, que incluso se echó a llorar: "Estoy encantado de veros", decía Manuel nada más entrar a la palapa, pero Anita no podía decir lo mismo y asegura que no le hacía "ninguna gracia" tenerle allí, momento en el que empezaron a brotar las lágrimas en sus ojos.
Tras unas semanas en las que Anita y Montoya han tenido un claro acercamiento, con besos en la noche incluidos, a la de Barcelona no le apetece que llegue el que fuera su tentador en 'La isla de las tentaciones', no por ella, sino por lo que pueda suponer para Montoya reavivar un pasado en el que le hizo sufrir mucho: "Me ha venido muy bien todo este tiempo para reforzar cosas con él, y no quiero que se fastidien otra vez porque vuelva a revivir todo", afirmaba Anita al borde de un ataque de ansiedad, que le hizo pronunciar unas peligrosas palabras: "Me voy a mi casa. Me quiero ir a mi p... casa".
El consejo de Laura Madrueño a Anita ante su amenaza de abandono en 'Supervivientes'
Montoya, que fue el salvado de la noche, intentó tranquilizarla, pero no con mucho éxito. "No te preocupes. Revives las cosas, al final es normal, pero no porque esté aquí él. Pero eso ya ha prescrito. No pasa nada, yo estoy en otro 'mood': estoy salvado, con apoyo y estoy tranquilo", señalaba el sevillano, y aunque reconocía que aún le dolía el pasado, dejaba claro que para él la presencia de Manuel no era una amenaza: "Para mí él es una persona invisible, un concursante más que pasa por aquí". "Bueno, invisible tampoco, si me toca, me toca. Yo no vengo aquí a que tú te pelees con ella. Si te peleas es porque tú quieres, no porque yo lo provoque", contestaba Manuel.
Al ver el panorama, Laura Madrueño decidía darle un sabio y valioso consejo a Anita, en el que dejaba claro que aquello no era 'La isla de las tentaciones': "Estamos en 'Supervivientes', estás disfrutando muchísimo de tu concurso, todavía no sabes lo que va a pasar. Estás demostrando que eres una gran superviviente, y todavía no sabes lo que nos depara, así que, porfi, relájate".
