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Aunque las peleas en 'Supervivientes' son la tónica general por los roces de la convivencia, también hay momentos de risas entre los concursantes que a veces nos dejan hasta ojipláticos, como el que han protagonizado Terelu Campos y Montoya en los Cayos Cochinos a cuenta de su ropa interior. El buen rollo entre el sevillano y la colaboradora se vio hace unos días con el sensual baile que él le hizo a ella, pero ahora han dado un paso más compartiendo impresiones sobre los olores de su ropa interior. El ex concursante de 'La isla de las tentaciones' lleva más de dos meses en el concurso, pero no se puede decir que no sea limpio, y es que se sorprendió a sí mismo al ver que sus calzoncillos aún olían a detergente.
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"¿Esto a ti te huele?", le dijo Montoya a Terelu mientras dudaba sobre si podía echar a lavar sus boxers. La colaboradora se llevó las manos a la cabeza. "Los cojones treintaitrés. Yo qué coño te voy a oler tus calzoncillos", le respondió ella, apartando la idea de llevarse la ropa interior de su compañero a la cara. "Si no huele. Aquí no hay ni trampa ni cartón, está muerto todo", insistía él. "Sí... huele... a polla huele", le replicaba Terelu, que acaba de volver a 'Supervivientes', sin cortarse en sus expresiones.
El sevillano volvía a la carga: "Huele, cojones, huele, huele", le decía acercándole la prenda a Terelu a la nariz. Ella, a pesar de su negativa, no podía parar de reír. "Por favor, si es para que tú sepas cómo huelen mis huevos. Si me dijo Anita que me huelen bien. Si me huelen hago un protocolo de abandono. Venga, como una madre a un hijo. Mi madre me lo olería, que no están sucios. Si huele a detergente de cuando Cristo perdió el mechero", bromeó él. "A mí tampoco me huelen las bragas y no se las doy a oler a nadie. Anita porque te quiere, y te miente", le decía ella con un sentido del humor del que ha hecho gala ya varias veces en el concurso.
"Que no huele, chocho. Mira", se empecinaba Montoya. Terelu, al final, daba su brazo a torcer. "Ah, pues no huele", se sorprendía ella. Una respuesta que daba pie al sevillano a sorprenderla una vez más. "¿A ver cómo te huelen a ti? ¡Uy! ¡Si huelen a rosas! ¡Uy, cómo le huelen las bragas a la Terelu!", gritaba él tras asomarse a la entrepierna de su compañera. La colaboradora no podía aguantar más risa. "Ay, que me meo, por favor", apuntaba ella. "Hombre, yo meado ya no sé cómo olerá", bromeaba él. Sin duda, una bonita amistad surgida en los Cayos Cochinos que confirma eso de que 'la confianza da asco'...
