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'Gran Hermano' se estrenó en el año 2000 en España y su peculiar formato llegó a la televisión nacional para quedarse. El reality que comenzó con 14 jóvenes desconocidos conquistó a la audiencia, y ya se ha convertido en historia de la televisión y del entretenimiento. Desde entonces, tal ha sido su éxito que hemos podido disfrutar de 'Gran Hermano DÚO' y 'Gran Hermano VIP'. Está claro que lo que pasa en Guadalix entretiene al público fiel que sigue la convivencia desde que se estrenó el programa.
En esa primera entrega de 'Gran Hermano' presentada por Mercedes Milá, fue Ismael Beiro quien se hizo con el maletín; pero para el recuerdo también quedaron rostros como el de María José Galera, Israel Pita, el segundo expulsado y que formó la primera pareja de la edición junto a Silvia Casado, Ania Iglesias o Íñigo González, el famoso hombre del polo verde. Una de esas concursantes de la primera edición fue Marina Díez, que ha tenido una vida difícil tras su paso por la casa más popular de Guadalix.
La trayectoria de Marina Díez tras 'Gran Hermano'
En la primera edición todos llegaban con ganas de comerse el mundo a un nuevo programa en el que ni los propios participantes imaginaban el éxito que tendría. Algunos de ellos siguieron con un pequeño hueco en la televisión, como María José Galera o Ismael Beiro, el ganador de la edición; pero otros optaron por alejarse de los focos, como es el caso de Marina Díez, que fue la cuarta expulsada durando 53 días en la casa.
Más allá de suponer algún beneficio, considera que el programa le restó oportunidades porque todo el mundo al verla la recordaba como concursante de un reality de televisión. "A partir del décimo año no sé que pasó, que fue como 'ah, eres de GH' en plan mal", explicó en una entrevista para la revista Lecturas. "Recuerdo en un trabajo que me encantó. El día que tenía que empezar me dijo la chica que no querían a nadie de la tele allí. 'Ponte tu ropa y vete', me dijo". Tal vez la fama no le vino en buen momento, ella misma admite que "me pilló demasiado joven" y que "ojalá me hubiese pillado más mayor para saber gestionarlo, me costó un poco al principio". Pese a todo, se muestra totalmente agradecida con el programa: "Viéndolo con el tiempo fue maravilloso. No tengo ni un pero".
Marina Díez mantiene relación con algunos de sus compañeros de 'Gran Hermano'
Todavía sigue manteniendo relación con algunos compañeros de edición. "Con quien más tengo relación es con Iván, Ismael, Íñigo y Jorge", explicó Marina, que hace poco se reencontró con Íñigo, el hombre del polo verde. "Con María José Galera no tengo contacto pero no tendría ningún problema con ella, le daría un abrazo enorme porque hace mil que no la veo".
Nueva vida tras 'Gran Hermano': su intento de negocio y un gran cambio físico
Después de que el programa terminase, la madrileña se mudó a Alicante, donde abrió un negocio que no logró sacar adelante, y fue desahuciada. "Es lo que pasa cuando te metes en historias con ayuntamientos. Cuando se junta la política con los caciques de los pueblos, al final tenemos la de perder los tontitos de a pie, los curritos", contó. "Luché mucho porque me pilló la pandemia de por medio". Incluso se habló de que estuvo en la ruina, situación que también explicó: "Se exageró todo mucho. Se quedó todo plasmado y no era tan así". "Por suerte, ahora no me falta el trabajo ni los amigos, y todo el mundo me respeta un montón", añadía.
Ahora, Marina Díez está volcada con su nueva vida, y es diplomada en cocina y gestión de restaurantes. "Me gano la vida con ello", asegura la ex concursante de 'Gran Hermano', que comparte en sus redes sociales distintas recetas. "He tenido negocio propio, he estado en cocina y ahora estoy como cocinera en una cafetería de mi localidad".
Marina también ha tenido momentos complicados, hace años tuvo que pasar por quirófano para una operación del corazón. "Lo que tenía mal eran las arterias", decía. "Tengo cuatro bypass, pero hago ejercicio de alta intensidad con normalidad. Llevo unos años entrenando y me encuentro súper bien". La madrileña ha tenido, además, un gran cambio físico en el que ha perdido 30 kilos, encontrándose con "infinitamente mejor movilidad y tremendas ganar de vivir".
¿Boda a la vista?
Marina lleva 16 años con su pareja, y asegura que son "un equipo". Sin embargo, no han sonado aún campanas de boda, aunque ella tiene claro que "ya toca". "Hay que encontrar el momento porque si no pasa una cosa, pasa otra", comentaba. "Pero lo tenemos en mente". Durante este tiempo, no han tenido hijos: "La verdad que no hemos querido. No he sentido la necesidad porque estamos muy bien como estamos". Aunque la que debutó en 'GH 1' asegura no cerrarse a nada y que "la tele me sigue llamando la atención", está claro que ha montado su vida alejada de los focos, y aunque ha pasado por algún que otro altibajo, ahora se encuentra más feliz que nunca.
