- Miguel Ángel Silvestre: repasamos las novias del actor
- Miguel Ángel Silvestre: antes y después desde 'Motivos personales' hasta la actualidad
- Los 55 actores más guapos de España (y con talento)
Miguel Ángel Silvestre puede dar la impresión de tener la vida solucionada, pero el actor de 'Sin tetas no hay paraíso', detrás de su imagen de 'dandy' exitoso, es una persona más con sus inseguridades y sus problemas del día a día, y sobre su lado más personal se sinceraba hace un tiempo en el podcast 'La Script' de la periodista María Guerra, a la que no sólo hablaba con mucho amor de su profesión como actor, sino también de episodios de su infancia o su adolescencia como un chaval tímido y hasta miedoso. Pero si sobre algo habló con pasión fue sobre su relación de amistad con Javier Bardem, al que respeta infinitamente como compañero pero también como amigo, y del que ha afirmado: "Un día me dedicó una conversación y de joven me hizo mucho bien".
Los dos actores coincidieron en la película 'Alacrán Enamorado', basada en la novela homónima escrita por Carlos Bardem, pero su amistad viene de mucho antes, por lo que la periodista le preguntaba sobre él: "Javier Bardem es un actor que siempre ha dicho que tiene maestro, coach, profesor... o sea, uno puede pensar que Javier Bardem ya no necesita aprender de nadie y, sin embargo, hablaba de Juan Carlos Corazza. No sé si tú también mantienes profesores, si siempre necesitas a alguien que te acompañe en un personaje", quería saber. Miguel Ángel, que recientemente ha sido noticia por su anécdota por su increíble parecido con Ilia Topuria, no se pensaba su respuesta, y, casualidades de la vida, también envolvía al marido de Penélope Cruz.
Miguel Ángel Silvestre habla de Javier Bardem
"Yo también entreno con Juan Carlos Corazza. Él hace cursos para profesionales donde he tenido la suerte, por cierto, de coincidir con Javier dos veces. Muchas veces es en grupo. De hecho, cuando Javier estaba nominado por 'No es país para viejos' (2007), yo me apunté a un curso de profesionales con Juan Carlos y de repente estaba Javier, y tuve la oportunidad de conocerle un poquito más, porque ya la había conocido en un evento y tal, y Javier siempre me ha parecido una persona muy generosa porque yo creo que somos muchos los que le miramos con esa admiración. Él como que sabe bajar el caballo, serenarlo y darnos ese espacio a todos que yo recuerdo con tanto cariño", le recuerda con cariño.
Es más, aún recuerda en aquellos cursos la charla que tuvo con él y que le cambió la vida: "Un día me dedicó una conversación y de joven me hizo mucho bien. Me contó anécdotas de su vida, inquietudes, y poder verle tan de verdad... a mí eso me hizo mucho bien".
