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El viaje de Estado del rey Felipe y la reina Letizia a Egipto, con el que pretenden consolidar los lazos con el país africano y reforzar las relaciones bilaterales con el mismo, está siendo un no parar, y en concreto ella nos ha dejado varios momentos para el recuerdo con sus looks impecables. Ya nada más llegar a El Cairo el pasado martes 16 deslumbró en la recepción oficial con un ajustadísimo vestido de escote bardot, un estilo al que nos tiene poco acostumbrados, y al día siguiente dejó a muchos boquiabiertos con un modelo casi nupcial en blanco con guipur de flores. Su visita a las pirámides de Guiza la hizo con un bonito y sofisticado vestido azul marino de crepé de seda. Y este jueves por la mañana tampoco ha decepcionado.
Mientras el Rey comenzaba este jueves 18 de septiembre con la inauguración del Foro Empresarial España-Egipto, la Reina lo hacía un poco más tarde, a las 11:30 de la mañana, con su visita a la Fundación Sultán, una organización sin ánimo de lucro que trata de garantizar el acceso a la cultura y al patrimonio egipcio de los más desfavorecidos, y en la que Letizia ha inaugurado una muestra fotográfica en la Fundación Sultán, dentro del complejo cultural de la Mezquita del Sultán Al-Ashraf Qait Bay. Ésta se encuentra situada en la Ciudad de los Muertos, un humilde barrio de El Cairo que conforma una gran necrópolis árabe de 8 kilómetros cuadrados, en la que más de un millón de ciudadanos conviven con tumbas y mausoleos. La exposición pretende mostrar la realidad de la vida cotidiana en el barrio, y ha sido financiada por la Embajada de España. Sin duda, un vecindario singular por el que la Reina ha paseado este jueves, y lo ha hecho con un look acorde para la ocasión, aunque arriesgado.
El guiño de Letizia en su look a la cultura egipcia para su visita a la Ciudad de los Muertos
A Letizia le encanta seguir la moda y las tendencias, y en esta ocasión ha querido arriesgar un poco más de la cuenta con su conjunto. Que, contra todo pronóstico, funciona a pesar de ser dos colores demasiado claros. La Reina y su estilista han escogido una chaqueta tipo sahariana de una firma local, Dina Shaker, con amplios bolsillos, de lo más funcional en color piedra, mientras que los pantalones, con pinzas y mucha caída, eran de color blanco. No es una combinación de colores común, ni siquiera los tejidos, y sin embargo ha conseguido que funcione. Un conjunto que ha completado con unas bailarinas también blancas con tiras de Sézane (uno de sus modelos favoritos: también las tiene en negro y en rojo) y unos largos pendientes dorados de Mishka, un taller adherido a esta fundación en el que trabajan 60 mujeres realizando trabajos de orfebrería y cuero, y con los que Letizia ha querido tener un guiño llevando una de sus creaciones.
La agenda del Rey continúa durante el resto del día con otros dos actos, mientras que la de la Reina este jueves es algo más breve. Los dos coincidirán de nuevo por la noche: se trasladarán a Luxor para realizar una visita al Templo de Hatshepsut en el Valle de los Reyes, y se hará junto a ellos la inauguración de la nueva iluminación.
