La Familia Real Holandesa se caracteriza por el buen humor y naturalidad que desprenden en cada uno de sus acontecimientos públicos, sin embargo, nunca les habíamos visto derrochando tanta buena sintonía como en la última sesión de fotos para la prensa. Estar de vacaciones en su medio favorito, la nieve, puede que influyera a la hora de que los miembros de la familia real se sintieran libres de posar fuera del protocolo como si de una familia al azar se tratara, con bromas incluidas.
Una vez al año desde hace ya más de 15, la Familia Real Holandesa posa durante sus vacaciones para la prensa, una maniobra con la que esperan que los fotógrafos y periodistas no molesten a sus miembros durante su temporada de descanso pues ya cuentan con las instantáneas pertinentes. En esta ocasión, el buen tiempo y el buen humor han hecho no solo que los periodistas se fueran con unas bonitas imágenes de la familia real.
La reina Máxima de Holanda es siempre el centro de atención de estas sesiones de fotografías, sin embargo, los chicos han rivalizado con ella al realizar diferentes y divertidas bromas al resto de los miembros de la familia. Como esta del sobrino del rey Guillermo Alejandro, el conde Claus Casimir, que saltó delante de la cámara para entrar en la fotografía reservada solo para mujeres. Tras él el propio monarca riendo e intenando emularle sin llegar a saltar.
Pero esta acrobacia no ha quitado protagonismo del todo a la reina Máxima de Holanda, muy tranquila a pesar de su polémica, quien ha sido captada mientras esquiaba con bonitos retratos que dejaban ver a los propios periodistas en sus gafas espejo. La reina optó por un conjunto morado de pantalón, forro polar y abrigo para poder disfrutar de la nieve junto a su familia entre las que se encontraban las tres hijas, las princesas Amalia, Alexia y Ariane, de 15, 13 y 11 años respectivamente y la princesa Beatriz, antigua soberana de 81 años, que disfrutaba también de la jornada con una amplia sonrisa.
En unas condiciones meteorológicas muy favorales, este lunes todos los miembros de la familia real disfrutaron practicando sus dotes en el esquí demostrando, las más jóvenes, que serán capaces de superar el gran estilo que sus padres tienen sobre la nieve.