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Frank Blanco empezó a trabajar en la radio de su pueblo, Mollet del Vallés, a los 15 años y, desde entonces, no ha dejado de 'colarse' en los hogares españoles, ya sea a través de las ondas o, como en los últimos años, desde la pequeña pantalla. Desde febrero lo hace desde 'TardeAR', junto a Verónica Dulanto. Un formato que a finales de agosto echa el cierre. Una noticia que nos pilló por sorpresa y, por eso, una vez hecha esta producción, volvimos a llamar a Frank para comentarla.
Frank, ¿cómo te enteraste de la noticia?
Me enteré oficialmente estando en Tarifa, con un viento de Levante que te despeinaba.
¿Te lo esperabas?
Lo esperaba a medias. Aunque el programa ha mejorado su franja en un punto en el último año y medio, era consciente de que la cadena necesitaba un poco más para mantenerlo en parrilla. Lo habíamos hablado en alguna ocasión.
¿Y ahora qué? ¿Ha hablado contigo la cadena de la próxima temporada?
Sí, claro. Tenemos una relación excelente, y ambas partes queremos seguir compartiendo proyectos, así que una vez que cerremos 'TardeAR' confío en que más pronto que tarde me veáis en pantalla, aunque al final eso no depende solo de mí.
Llevas toda la vida en los medios, ¿qué te queda por hacer que te ilusione?
¡Muchísimas cosas! Para empezar volver a la radio, donde empecé, y es un medio al que quiero con todo mi corazón y echo de menos. La radio es mi asignatura pendiente y quiero retomarla en algún momento. Y luego, televisivamente me apetece hacer un late night.
Frank Blanco: "Los conflictos me dan la vida"
¿Has estado cómodo en 'TardeAR' a pesar de los conflictos?
No a pesar de los conflictos sino gracias a ellos. Sin que llegue la sangre al río, los conflictos me dan la vida.
En el programa te has enfadado bastante…
Es que hay tardes que se complican un poco (risas). A veces estoy rodeado de una decena de personas y, todas son muy buenas, y quieren hacer su trabajo pero deberían saber que no se puede hablar a la vez. Y me pongo serio, pero todo se debe a la pasión.
¿Alguna vez estos roces han salido del plató?
Ha podido haber un malentendido pero con una conversación queda arreglado.
¿Echabas de menos tener vacaciones?
No, pero es verdad que ya lo estaba necesitando. Este año no he parado en lo profesional y además tengo dos hijos adolescentes. Con ellos tengo que estar negociando todos los días… El trabajo ese de padre también consume. Así que necesitaba escaparme sí o sí (risas).
¿Qué te ha enseñado la paternidad que no te haya enseñado la tele?
A tener más paciencia. Antes no tenía y ahora ni me reconozco. Y en lo personal, el ser padre me ha enseñado a saber lo que ha querido mi padre y lo que me debe querer mi madre, que es algo que ni te imaginas aunque te lo cuente la gente. Cuando descubres ese sentimiento te sorprendes.
¿Eres más estricto con ellos o más consentidor?
Depende del momento y del día. Mi chica y yo nos lo alternamos. Los dos trabajamos mucho y hay días que le toca a uno todo.
Tu mujer también se dedica a esto, ¿te gustaría trabajar con ella?
Nos conocimos en la radio y empezamos a ser pareja cuando dejamos de trabajar juntos porque no éramos muy compatibles que se diga.
Entonces, de volver a trabajar juntos ni hablar, ¿no?
(Risas) Bueno, ahora es otra película. Los dos hemos evolucionado y puedo entender el por qué de cuando éramos compañeros. Te hablo de hace más de veinte años. Así que no lo tengo entre mis proyectos, pero no sería un mal plan.
¿Cuál ha sido el peor momento que has tenido que gestionar a nivel profesional?
Pues por ejemplo salir de algún proyecto que yo no quería salir.
Me imagino que te refieres a 'Zapeando'.
Yo vi nacer ese proyecto y le acompañé en su crecimiento. Tenía mucho de mí. Es verdad que cada presentador tiene su estilo y le impregna su carácter, pero mi salida no fue agradable.
Y, sin embargo, le deseabas lo mejor a Dani Mateo.
¡Claro! Hay mucha gente en esta profesión que cuando pasan cosas así ponen el foco en el sitio equivocado. Yo a Dani además le conozco desde que era adolescente. Su primera vez en la radio fue conmigo, en mi pueblo, y le tengo un cariño especial.
¿Qué haces para desconectar?
No soy nada especial; puedo irme a la montaña, la playa o al cine a ver una peli, pero mi manera ideal de desconectar es estar con mi gente, sea donde sea y como sea. Lo importante es estar con mi familia, mis amigos… Yo una mala semana la puedo remontar un viernes con una cena entre amigos, una botella de vino y cuatro risas.
Frank Blanco: "Si me cuentan algo llorando, lloro"
¿Recuerdas la última vez que has llorado?
Es muy friki (risas). Fui a ver 'Superman' y nada más escuchar la música de John William se me cayó la lagrimilla de emoción. Soy súper fan de Superman. Conecta con el niño que llevo dentro.
Eres un tipo sensible.
Sí. Soy de los que si me cuentan algo llorando, lloro. Soy muy empático. A veces es un problema en el trabajo.
¿Alguna vez te ha pasado con la risa?
Muchas veces. En 'Los 40 principales' era el pan nuestro de cada día. Pero hay un truco; pellizcarse la pierna hasta hacerse daño.
Hablabas de esa etapa en Los 40. Eso era el sueño de cualquier estudiante que adorara la música.
Fue la mejor etapa de mi vida, pero no me di cuenta. Tú imagínate la vida que llevas; te invitan a todos los conciertos, en España y fuera, conoces a todos los artistas, a mí me han faltado Madonna y Michael Jackson.
¿A quién has conocido?
Coldplay, George Michael, Elton John, REM, Mariah Carey, Beyonce, Cher… Y me doy cuenta ahora. En aquel entonces no dejaba de ser trabajo y estaba metido en esa rueda y no lo disfruté. Sabiendo, eso sí, que era la bomba. Si se repitiera sí sería más consciente. Lo que viví fue único. Además, conseguí ser compañero y amigo de los que habían sido mis ídolos: Tony Aguilar y Joaquín Luqui, que en paz descanse.
¿Y en aquella época no te reconocían por la voz?
Sí, todavía me pasa. Hay veces que se giran por la voz y luego ya me ponen cara porque ahora con la tele ya soy más reconocible.
¿Y en casa pinchas?
No, pero selecciono la música cuando estamos en familia o en una cena. Dicen que tengo buen criterio.
Seguro que tus hijos no…
No, en el coche me presionan mucho para poner sus movidas, pero está muy bien para no dejar de estar conectado. Hay algunas que no me compraría el disco, pero tienen su rollo.
Frank Blanco: "No participaría en un reality"
Tus hijos viviendo con dos periodistas, ¿también van encaminados a esto?
Tengo la duda, pero les vemos con aptitudes a los dos. El pequeño podría ser artista y dedicarse a la interpretación, pero también dice que quiere ser futbolista. El trato es tener plan B por si no conseguimos ser el Cristiano Ronaldo de 2030 (risas). Y el mayor sí ha verbalizado que le gustaría hacer Periodismo deportivo o radio musical. De hecho, no hace mucho, una mañana escuchando a Tony Aguilar me dijo: 'Yo quiero ser como él'. Y le dije: '¿Cómo como él? ¡Ese programa lo he hecho yo!' (risas). Tienen 13 y 14 años. Lo que decidan ser se les apoyará. Yo pido y deseo que se dediquen a otra cosa.
Y entre todo esto, ¿te da tiempo a escribir otro libro?
No. Eso está descartado a día de hoy. No me considero escritor y lo he pasado muy mal haciéndolo porque hasta que entregaba un libro no paraba de repasar, cambiar cosas, eso fue enfermizo. Acababa tan extenuado que prefiero no hacerlo más.
¿Y un reality?
No. Yo presento el que quieras, pero participar no.
¿Dónde te ves en 10 años?
No soy de los de morir trabajando pero mi amor por la radio está ahí y por la tele también. Ahora no podría elegir.
Cita con Frank Blanco en... Restaurante Mena
Quedamos con Frank en el Restaurante Mena, en La Finca Grand Café. Un local precioso y con una gastronomía con premio. Ha sido galardonado con el premio Hot Concepts 2025 en la categoría Fine Dining, un reconocimiento que consolida su posición como uno de los espacios más relevantes del panorama culinario de los últimos años.
Frank Blanco, sus secretos de belleza
Antes de irme a la cama… Me pongo un poco de Minoxidil en el pelo para no perderlo.
Voy a la peluquería… Cada tres semanas, llueva o truene.
Tengo cremas o se las robo a mi mujer... Yo tengo las mías pero si yo tengo dos, ella quince.
Mi perfume es… Lo descubrí en Londres hace muchos años. Se llama Laboratory Perfumes Nº1.
Cómo me cuido... Intento hacer ejercicio y, de vez en cuando, me hago algún tratamiento facial porque la cara de los que trabajamos en la tele hay que cuidarla.
Los favoritos del maquillador Pablo Cerdán
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Frank Blanco con el equipo de Diez Minutos
Texto: Susana Jurado. Fotos: Beatriz Velasco. Ayudante: P. Arquero. Estilismo: María Pulido. Maquillaje y peluquería: Pablo Cerdán. Agradecimientos: Restaurante Mena. LaFinca Grand Café. Avenida de Luis García Cereceda, 5. Pozuelo de Alarcón (Madrid). Teléfono: 676 636 968.
Susana Jurado es redactora de Diez Minutos, experta en belleza y sociedad, sobre todo en celebrities como Ana Obregón, Isabel Pantoja, la reina Letizia... En los más de veinte años que lleva en la profesión ha hecho de todo: radio, prensa y televisión, especializándose en todo lo que tuviera que ver con los famosos.
Ha pasado por TP, Supertele, Teleindiscreta, ¡QMD! y Diez Minutos, donde ya lleva unos cuantos años, para qué concretar… Adora investigar en los temas de actualidad, hacer mil llamadas para dar con la información correcta y entrevistar a los protagonistas de mayor tirón mediático. A la hora de hacer preguntas no se corta ni un pelo para conseguir el mejor titular, siempre con educación, claro. Porque eso de que no hay pregunta mal hecha sino mal interpretada es una verdad como un puño.
Enganchada completamente a las noticias de famosos, a las redes sociales y a todo lo que tenga que ver con la belleza. Empezó de becaria en la radio, en un pequeño programa de Radio Exterior de España, donde verdaderamente descubrió que esa niña que le pedía continuamente ser Periodista no se había equivocado. Desde entonces ese gusanillo no ha parado y ha compatibilizado la redacción en diferentes revistas con programas de televisión como: Antena 3, Telecinco, Telemadrid y Televisión Española. Actualmente colabora en Cuatro.
