Berrin está muy triste por la decisión de Aylín de seguir adelante con su embarazo, a pesar de que puede morir en el momento del parto. Asustada por lo que pueda ocurrirle a su hermana, decide llamar a Tarik para pedirle consejo. “Quizá si habla con otro médico, le haga entrar en razón”, comenta la joven al doctor. Este se compromete a hacer todo lo posible por ayudarles.

Después de colgar el teléfono, Hakan llama a la puerta para traer a Zehra. Berrin abraza a su hija con fuerza y le agradece a su futuro exmarido que le permita pasar al noche con la niña. El matrimonio sigue adelanta con sus planes de divorcio, pero la relación entre los dos es más cordial que antes, sobre todo, desde que Ahmet se ha distanciado de Berrin.

En la cárcel por asesinato

Por otro lado, Mete pasa la noche en prisión, al igual que Nihal. La pareja sigue detenida por el asesinato de Haki y ninguno de los dos quiere confesar quién fue el que apretó el gatillo y acabó con la vida del pérfido hombre. Incluso, llegan hasta a auto inculparse para evitar que el otro vaya a prisión. Alí está tremendamente triste por lo ocurrido con su hijo y se refugia en Mustafá.

Mientras tanto, Cemilé, que se niega a abandonar a Mete a su suerte en comisaría, se queda cerca de las dependencias policiales tomando algo con Nedim. El abogado le ofrece su apoyo en tan duros momentos. Se ha convertido en un buen amigo para la exempresaria.